El desplome que ha sufrido el petróleo en los momentos más tensos que se han vivido en los mercados durante la crisis del coronavirus parece que ha convencido a los grandes productores de crudo, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus socios externos (el cártel conocido como OPEP+), de la necesidad de estrechar lazos y dejar a un lado las diferencias del pasado. Este fin de semana el cártel de productores ha ratificado su pacto de recorte de oferta, con menos tensiones de lo que viene siendo habitual en los últimos meses. La OPEP+ continuará manteniendo la producción limitada al menos hasta que termine julio, un pacto que se ha conseguido tras presionar Arabia Saudí a algunos de sus socios, como Iraq, para que dejen de escurrir el bulto y cumplan con la totalidad del compromiso que asumieron en abril. Los precios del crudo han subido con fuerza a lo largo del fin de semana, pero hoy lunes corrigen de forma moderada: el Brent europeo ronda los 42 dólares el barril y el West Texas (WTI) de EEUU baja a los 39 dólares.
Y es que, aunque entonces se pactó el mayor recorte de oferta de la historia, la realidad es que este todavía no se había puesto en práctica en toda su magnitud, con una reducción que a cierre de mayo era de 7,8 millones de barriles diarios, según los datos de Bank of America (NYSE:BAC), mientras que el pacto comprometía al cártel a reducir la oferta en 9,7 millones de barriles.
Arabia Saudí, como viene siendo habitual en los últimos años, estaba siendo el país que se había colgado sobre sus hombros la mayor parte del recorte de oferta, y es por ello que en las negociaciones de la semana pasada fue quien presionó al resto para que cumpliesen con lo pactado, bajo la amenaza de no aceptar la ampliación del recorte y, como ocurrió a principios del segundo trimestre, insinuando que podía volver la guerra de precios que llevó al barril de petróleo a tocar mínimos del año, en los 19 dólares en el caso del Brent.
Falta de oferta antes de 2021
Las subidas que ha experimentado el precio del petróleo desde los mínimos que se han visto este año muestran hasta qué punto ha sido efectivo el acuerdo de la OPEP en las últimas semanas. Sin embargo, no ha sido el único factor que ha ayudado a la recuperación: la demanda de gasolina y petróleo está recuperándose desde los niveles más bajos que ha tocado en el año, a medida que el confinamiento se va reduciendo en países como Estados Unidos, el mayor consumidor de crudo, y otras regiones.