Panorama mixto en el comercio minorista
Durante abril de 2023 las ventas minoristas presentaron su mejor resultado de los últimos 13 meses al avanzar en 1.54% mensual y se recuperaron de los sobresaltos que supusieron febrero (-0.34%) y marzo (-1.24%). Esta información llega como una sorpresa, pues el consenso esperaba un crecimiento más cercano a 0.50% mensual y avala el cuadro de mejora integral para la economía que delineamos en la actualización de nuestra perspectiva. Incluso, creemos que la magnitud del incremento pudiera ampliar más el sesgo alcista para los resultados del segundo trimestre, recordando que ayer el INEGI revisó su pronóstico para abril desde +0.4% mensual hasta +0.6%. De esta manera, el comercio y la demanda interna siguen luciendo como uno de los pilares del crecimiento mexicano en este 2023, aunque los meses siguientes serán clave para evaluar el tamaño de los límites impuestos por la postura monetaria restrictiva.
6 de los 9 componentes tuvieron variaciones positivas
De manera desglosada, 6 de los 9 componentes tuvieron variaciones mensuales positivas y 3 de ellos tuvieron incrementos de más de 1.0% mensual. Destacan las ventas de la ANTAD con un crecimiento de 2.3% y, dentro de estas, el segmento de tiendas departamentales con +8.2%. Por ahora, este último registro parece más un sobresalto en la tendencia lateral que ha dominado el desempeño de las tiendas departamentales en los últimos 11 meses que una muestra de dinamismo, pues los datos que la ANTAD ha adelantado para mayo sugieren que veremos una fuerte desaceleración. Además, las ventas del sector automotriz generan cierta alerta, especialmente las de automóviles y camionetas, pues acumulan 4 meses de declives moderados y han descendido hasta su nivel más bajo desde marzo de 2022, cuando el mundo apenas salía de los estragos ocasionados por la variante Ómicron del Covid-19.
¿Qué esperar?
El dato de hoy es positivo en tanto permite balancear los riesgos que se asomaban para inicios del segundo trimestre. Sin embargo, aún no está claro que el desempeño sea sostenible hacia adelante y, por el contrario, lo que sucede con el componente de ventas automotrices bien podría avisar de las presiones a la baja que el consumo recibe de las elevadas tasas de interés. Más aún, los últimos datos han sido muy irregulares y será necesario esperar a contar con más información para distinguir los efectos de los múltiples factores que subyacen al panorama.
