El viernes, Baird, una empresa de servicios financieros, ajustó su precio objetivo para Qualys (NASDAQ: QLYS), una empresa de ciberseguridad, aumentándolo a 150 dólares desde 145 dólares, manteniendo una calificación neutral sobre la acción. El ajuste se produce en medio de los desafíos a los que se enfrenta la empresa, incluida la presión sobre su negocio principal de gestión de vulnerabilidades (VM) y un entorno competitivo cada vez más intenso.
Qualys ha sido uno de los valores con peores resultados en lo que va de año, con un descenso de su cotización de aproximadamente el 28%, en contraste con el IGV (un índice que sigue a las empresas tecnológicas), que ha experimentado una subida de alrededor del 25%. A pesar de estos retos, el análisis de Baird apunta a que las expectativas de crecimiento de los ingresos de Qualys se sitúen en un rango porcentual de mediados a mediados de la década de los noventa en 2025.
La salud financiera de la empresa se pone de relieve por sus sustanciales márgenes operativos de más del 40% y márgenes de flujo de caja libre (FCF) en el rango de mediados de los treinta por ciento. Estas métricas sugieren que Qualys se adhiere bien a la Regla del 40, un principio financiero que sugiere que la tasa de crecimiento y el margen de beneficio combinados de una empresa deben superar el 40% para un crecimiento sostenible.
El analista de Baird hizo un comentario sobre las perspectivas de la empresa, afirmando: "Creemos que QLYS seguirá enfrentándose a presiones a medida que el core VM se convierta cada vez más en una apuesta de mesa". Esto indica que, aunque Qualys mantiene unos sólidos fundamentos financieros, la estandarización de la gestión de vulnerabilidades en el sector de la ciberseguridad podría seguir poniendo a prueba el rendimiento de la empresa.
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