El viernes, UBS cambió la calificación de las acciones de Burberry Group PLC (LON:BRBY:LN) (OTC: BBRYF) de "Vender" a "Neutral", y aumentó significativamente el precio objetivo a 9,75 GBP, frente a los 4,10 GBP anteriores. Este ajuste se produce después de que Burberry anunciara sus resultados del primer semestre, que superaron las expectativas.
Burberry registró un descenso menor de lo previsto en las ventas comparables del segundo trimestre, con una caída del 20% frente a la estimación de consenso de un descenso del 21% y la previsión de UBS de una caída del 24%.
Además, la empresa de moda de lujo registró una pérdida menor en el primer semestre, de 41 millones de GBP, más favorable que la estimación de consenso de 46 millones de GBP y la previsión de UBS de 63 millones de GBP. Esto se atribuyó a las eficaces medidas de control de costes.
El mismo día en que se dieron a conocer los resultados financieros, el nuevo consejero delegado de Burberry, Jonathan Akeroyd, dio a conocer una estrategia actualizada destinada a devolver a la marca a sus raíces, centrándose en la ropa exterior, el patrimonio y unos precios más accesibles. Este cambio se produce tras años de esfuerzos por elevar la marca que no cumplieron las expectativas y de desviaciones hacia tendencias de moda estacionales.
UBS reconoció la actualización estratégica como un movimiento positivo que podría dar lugar a una mejora a corto plazo en el impulso de las ventas. Aunque sigue existiendo escepticismo en cuanto a la rentabilidad a largo plazo de Burberry, la firma prevé que estas preocupaciones no serán relevantes de forma inmediata. UBS sigue de cerca la evolución futura de Burberry tras estos cambios.
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