* Tres semanas de inundaciones generaron amplios daños a cultivos
* Camiones de soja de zonas afectadas, con 30-40 pct grano dañado
* Productores locales sufren descuentos de hasta 35 pct en precio
Por Maximiliano Rizzi
BUENOS AIRES, 28 abr (Reuters) - La calidad de la soja de Argentina se vio golpeada por hongos y enfermedades generados por las lluvias, lo que está llevando a agricultores a sufrir descuentos de hasta el 35 por ciento en el precio de sus granos, dijeron a Reuters expertos del sector.
Incesantes lluvias en las tres primeras semanas de abril dejaron a más de la mitad de la región agrícola de Argentina bajo el agua en plena etapa de recolección, lo que recortará con fuerza la cosecha 2015/16 del tercer exportador mundial de soja. Esto ha impulsado los precios globales del poroto. esas ganancias podrían ser borradas por las pérdidas y por los descuentos que ya están empezando a sufrir los productores por la mala calidad de gran parte de los granos que provienen de las áreas afectadas, que incluyen a la mitad del cinturón agrícola central.
"En general, la mercadería mala está saliendo con entre el 20 y 30 por ciento de soja dañada, que le correspondería entre un 15 y un 25 por ciento de descuento", dijo a Reuters Guillermo Mouliá, operador de la correduría de granos Guardatti Torti, situada en Rosario, el principal puerto agroexportador del país.
Cuando un camión de soja para exportar supera el 5 por ciento de granos dañados, por cada punto porcentual adicional se aplica un descuento de alrededor del 1 por ciento en el precio. Para la oleaginosa con destino a molienda, el mismo descuento rige cuando el material dañado pasa la barrera del 8 por ciento.
Por eso los productores que pudieron recolectar algo de soja antes del temporal podrán mezclar esos granos con otros de menor calidad para evitar o aliviar descuentos. Pero con apenas el 24 por ciento del área cosechada, muchos corren el riesgo de que sus granos sean incluso rechazados por los puertos o acopios.
Natalia Colombo, operadora de la correduría BLD -también de Rosario-, dijo que "los compradores están recibiendo mercadería con daño de 10 por ciento hasta 40 por ciento, según el puerto", lo que implica descuentos del 5 al 35 por ciento, respectivamente.
La Bolsa de Comercio de Rosario también manifestó su preocupación y afirmó que en la importante región del centro-sur de la provincia Santa Fe -donde está Rosario- los ratios de grano dañado llegan hasta el 80 por ciento en algunos casos.
"El escenario de cosecha es el más difícil en la historia de la región", señaló.
MÁS ACEITE Y HARINA
Algunos cargamentos han llegado a los puertos con hasta el 70 por ciento de la oleaginosa dañada, lo que dificulta mucho a los productores vender sus granos, aunque sea a bajo precio, dijo Fernando Botta, analista de la corredora Agrobrokers.
"La soja que se exporta como poroto tiene un estándar que hoy casi ninguna soja que venga del este de Córdoba, Santa Fe o Entre Ríos puede cumplir", explicó Botta, en referencia a que esos granos deberán ser usados para producir aceite y harina de soja, de los que Argentina es el mayor proveedor global.
El temporal sin precedentes de abril obligó a los productores a dejar sus granos bajo el agua por tres semanas, lo que disparó las enfermedades de fin de ciclo, que golpearán los rendimientos y la calidad de los porotos.
"Va a haber mucho deterioro de las semillas por los hongos Alternaria y Fusarium, que son hongos de cosecha demorada. A partir de los diez días de demora y con lluvias, el daño ya es grave", explicó Antonio Ivancovich, experto en sanidad del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Si bien habrá que esperar a que los productores retomen la recolección para precisar las pérdidas, la situación podría golpear también a las finanzas del país, en momentos en que el Gobierno busca impulsar las exportaciones para obtener las divisas que necesita para reactivar su estancada economía.
La semana pasada, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires bajó a 56 millones de toneladas su estimación para la producción del ciclo 2015/16, desde los 60 millones previstos anteriormente, aunque los analistas coinciden en que los pronósticos caerán aún más cuando el agua baje y se puedan cuantificar los daños.
Un tercio del área de soja en Argentina aún permanece bajo el agua, mientras que otro tercio sufre algunos excesos hídricos y el restante está en muy buenas condiciones, por lo que se espera que la campaña 2015/16 tengo un resultado muy dispar.
"Hay muchísimos lotes sin cosechar que, literalmente, están podridos", dijo Marcelo Carmona, experto en fitopatología de la Universidad de Buenos Aires (FAUBA). (Editado por Lucila Sigal/Nicolás Misculin)