RÍO DE JANEIRO, 19 feb (Reuters) - El estado brasileño de Río de Janeiro planea eliminar los nuevos impuestos a la producción de petróleo y gas antes de su entrada en vigor en marzo, ante las preocupaciones de que afecten a una industria ya debilitada, dijo el viernes a Reuters una fuente involucrada en las negociaciones.
El arancel fue aprobado por la legislatura estatal el año pasado en un esfuerzo por aliviar la creciente crisis financiera, que provocó el cierre de hospitales y clínicas y dejó a miles de empleados estatales sin salario. No obstante, la ley fue criticada por los líderes de la industria, que temían un impacto negativo ante la caída de los precios del petróleo.
Río de Janeiro representa más del 60 por ciento de la producción de petróleo de Brasil y un 40 por ciento de la de gas natural.
Los impuestos incluyen un "impuesto medioambiental" de 2,71 reales (0,67 dólares) por barril a toda la producción de crudo y gas. El gobierno esperaba que el tributo ayudara a recaudar casi 1.840 millones de reales (454 millones de dólares) anuales.
El gobierno estatal también aprobó un arancel por bienes y servicios del 18 por ciento por cada barril de petróleo.
El impuesto habría llevado el punto de equilibrio del precio de petróleo para los gigantescos nuevos recursos de la región subsal, al sur de Río de Janeiro, a entre 60 y 80 dólares por barril, desde entre 40 y 50 dólares, dijo Edmar de Almeida, economista de la Universidad Federal de Río de Janeiro.
El referencial Brent LCOc1 caía 2,2 por ciento el viernes, a 33,53 dólares por barril, cerca de mínimos de doce años.
La fuente, que pidió mantenerse en el anonimato, dijo que el gobernador y su gabinete aún no han elegido la justificación legal que emplearán para bloquear la ley tributaria.
(1 dólar = 4,05 real)
(Reporte de Rodrigo Viga Gaier; escrito por Jeb Blount; editado en español por María Cecilia Mora)