El lunes, el índice del dólar estadounidense (DXY) cayó por debajo del umbral significativo de 102,16, un nivel visto por última vez durante el flash crash del 5 de agosto. Los analistas de ING atribuyen el descenso a un ajuste sistemático, ya que la Reserva Federal se prepara para un recorte anticipado de los tipos. Esta semana, la atención del mercado se centrará en la Reserva Federal, con varios acontecimientos clave, empezando por las declaraciones del Gobernador de la Reserva Federal, Christopher Waller, previstas para hoy.
El miércoles se publicarán las actas de la reunión de julio del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), en las que se hace hincapié en el doble mandato de la Reserva Federal: máximo empleo y estabilidad de precios.
Los especuladores del mercado parecen estar apostando por una mayor debilidad del dólar en previsión de la primera bajada de tipos de la Fed desde el inicio de su ciclo de endurecimiento, prevista para el 18 de septiembre. A pesar de los argumentos de que una flexibilización de la Fed al 3,00/3,25% ya se tiene en cuenta en el valor del dólar, los analistas de ING recomiendan cautela, ya que el ciclo de flexibilización aún no ha comenzado. Unos datos estadounidenses más suaves podrían dar lugar a nuevos ajustes en las previsiones de tipos de la Fed.
La reciente debilidad del dólar no se atribuye únicamente a la bajada de los tipos en EE.UU.; las ganancias derivadas de los buenos datos de ventas minoristas de julio de la semana pasada fueron efímeras. Los analistas están pendientes del índice del dólar para ver si supera el nivel de 101,75, lo que podría indicar una nueva caída hacia 101,00.
El evento clave de la semana es el discurso del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, sobre las perspectivas económicas en el simposio de Jackson Hole el viernes. Este discurso es muy esperado, ya que puede proporcionar más información sobre las futuras decisiones de política monetaria de la Fed y el impacto potencial sobre el dólar estadounidense.
La economía estadounidense ha experimentado una serie de acontecimientos. El Presidente Joe Biden y la Vicepresidenta Kamala Harris han estado trabajando en políticas económicas centradas en reformas fiscales, la lucha contra la inflación y el fomento de la política industrial. Pretenden crear un sistema fiscal equitativo, dirigido especialmente a los ricos y las grandes empresas, sin afectar a quienes ganan menos de 400.000 dólares anuales.
En julio, la producción manufacturera estadounidense experimentó un retroceso debido a una caída significativa de la producción de vehículos de motor y a los efectos del huracán Beryl. La Reserva Federal informó de un descenso de la producción fabril del 0,3% en el mes, más pronunciado que la caída del 0,2% prevista por los economistas.
Por el contrario, los precios de importación estadounidenses experimentaron un aumento marginal en julio, lo que indica una continuación de las cifras de inflación moderada. La Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo informó de un aumento del 0,1% en los precios de importación, debido principalmente a una ligera recuperación de los costes de los productos energéticos.
En el mercado laboral, el número de estadounidenses que solicitaron prestaciones por desempleo la semana pasada descendió, lo que apunta a una desaceleración estable. El Departamento de Trabajo informó de que las solicitudes iniciales de subsidios estatales de desempleo cayeron en 7.000, hasta una cifra desestacionalizada de 227.000, en la semana que finalizó el 10 de agosto.
Por último, las cifras de ventas minoristas en Estados Unidos y los datos del producto interior bruto (PIB) británico serán fundamentales para los mercados de divisas, y podrían provocar movimientos significativos del dólar y la libra esterlina. Los inversores están muy atentos a estos indicadores para evaluar la posible trayectoria de los recortes de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra.
Perspectivas de InvestingPro
Mientras el índice del dólar estadounidense (DXY) experimenta una notable caída, los datos en tiempo real de InvestingPro muestran una imagen matizada de su comportamiento. Durante la última semana, el DXY ha experimentado un ligero descenso del 0,81%, con una rentabilidad total más pronunciada a 1 y 3 meses del -2,06% y -2,11%, respectivamente. Curiosamente, a pesar de estas recientes caídas, la rentabilidad en lo que va de año se sitúa en un positivo 0,85%, lo que pone de relieve cierta resistencia en el comportamiento del dólar en medio de las fluctuaciones del mercado.
InvestingPro consejos sugieren que los inversores deben vigilar el precio de cierre anterior del DXY de 102,46 USD como un indicador potencial del sentimiento del mercado a corto plazo. Además, con otros 17 consejos de InvestingPro disponibles, aquellos interesados en un análisis más profundo pueden encontrar más orientación sobre cómo navegar por los movimientos de la divisa en relación con las próximas decisiones de la Reserva Federal y los indicadores económicos.
Estas métricas y consejos son especialmente relevantes a medida que los participantes en el mercado evalúan la trayectoria del dólar de cara a los posibles cambios de política. Con la anticipada bajada de tipos de la Reserva Federal y el próximo discurso del presidente Powell, comprender las sutiles tendencias en la evolución del DXY podría ser fundamental tanto para los inversores como para los analistas.
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