Dos demandas presentadas recientemente podrían tener un impacto potencial en la criptoindustria, ya que las partes demandantes apuntan al propietario de Facebook (NASDAQ:FB), Meta, y al importante criptointercambio Coinbase (NASDAQ:COIN) por su supuesta falta de voluntad para tomar medidas más decisivas para combatir los anuncios fraudulentos relacionados con las criptos y participar en la venta de valores sin licencia, respectivamente.
En virtud de la primera demanda, la Comisión Australiana de Competencia y Consumidores (ACCC, por sus siglas en inglés) inició procedimientos judiciales federales contra Meta Platforms, Inc. y Meta Platforms Ireland Limited, alegando que se involucran en conductas falsas, engañosas o engañosas al permitir la publicación de estafas criptográficas. anuncios relacionados con figuras públicas australianas prominentes en la plataforma de redes sociales que operan.
La ACCC afirma que los anuncios de Facebook, que promovían inversiones en criptomonedas o esquemas para hacer dinero, probablemente inducirían a error a los usuarios de la plataforma haciéndoles creer que los esquemas estaban asociados con australianos conocidos como el empresario Dick Smith, el presentador de televisión David Koch y el ex primer ministro del estado australiano de Nueva Gales del Sur, Mike Baird. Se dice que las personas que aparecen en los anuncios nunca los aprobaron ni respaldaron.
“La esencia de nuestro caso es que Meta es responsable de estos anuncios que publica en su plataforma”, dijo en un comunicado Rod Sims, presidente del organismo de control australiano, y agregó que:
“Es una parte clave del negocio de Meta permitir que los anunciantes se dirijan a los usuarios que tienen más probabilidades de hacer clic en el enlace de un anuncio para visitar la página de inicio del anuncio, utilizando los algoritmos de Facebook. Esas visitas a las páginas de destino de los anuncios generan ingresos sustanciales para Facebook”.El segundo caso legal, que involucra una demanda colectiva contra Coinbase, acusa a la bolsa de vender valores a sus clientes a pesar de no tener una licencia para hacerlo.
Debido a esto, los tres demandantes, que son residentes de los EEUU, específicamente California, Nueva Jersey y Florida, buscan USD 5 millones en nombre de ellos mismos, pero también de todos los demás clientes que compraron dogecoin (DOGE) y otras 78 monedas a través de Coinbase.
El sitio web oficial de la demanda incluye documentos judiciales que afirman que los demandantes creen que Coinbase no ha revelado que los tokens vendidos son de hecho valores y que:
El intercambio "está vendiendo estos valores a pesar del hecho de que no existe una declaración de registro vigente para estos valores y a pesar del hecho de que Coinbase se ha negado a registrarse como bolsa de valores o como corredor de bolsa".La demanda fue presentada ante el Distrito Sur de Nueva York, Estados Unidos.
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