La Fundación IOTA, el pilar principal detrás del desarrollo de MIOTA, presentó hace días el protocolo Coordicide, para mejorar las altas tarifas de transacción, la escalabilidad y la descentralización de la red.
El proyecto fue recibido con gran interés por la criptocomunidad, recibiendo opiniones de Vitalik Buterin y otras personalidades relevantes.