Además del debate en curso sobre el estado legal de los criptoactivos, un jurado federal en Connecticut, EEUU, ha dictaminado que una criptomoneda y los activos relacionados ofrecidos por los fundadores de Paycoin no son valores.
El jurado emitió su veredicto, que va en contra de la postura presentada por la Comisión de Bolsa de Valores (SEC), en relación con un caso que involucra a Homero Joshua Garza, el fundador de la criptomoneda Paycoin, según el comentario del bufete de abogados Mintz, Levin, Cohn, Ferris, Glovsky y Popeo, publicado en The National Law Review.
El Departamento de Justicia de EEUU. (DoJ) ya había procesado con éxito a Garza, quien se declaró culpable en 2017, recibió una sentencia de prisión de 21 meses y se le ordenó pagar alrededor de US$9.2 millones en restitución.
El último juicio involucró una demanda colectiva de valores civiles entablada contra Stuart Fraser, socio comercial y mentor de Garza, y dos entidades mineras criptográficas fundadas por Garza, GAW Miners y ZenMiner. La demanda indicaba que los acusados desarrollaron un esquema con el objetivo de defraudar a los inversores ofreciéndoles una variedad de productos, incluidos intereses en sus operaciones de criptominería y, finalmente, Paycoin.
Como parte del juicio, el juez instruyó al jurado para que decidiera si los productos ofertados constituían contratos de inversión y, en consecuencia, valores. Para responder a esta pregunta, los miembros del jurado tuvieron que aplicar el llamado Test Howey desarrollado por la Corte Suprema de Estados Unidos en 1946.
Según esta prueba, y según un análisis del Servicio de Investigación del Congreso, un producto debe cumplir con los siguientes criterios para ser considerado un valor:
Debe ser una inversión de dinero;Debe ser en una empresa común;Debe implicar una expectativa razonable de ganancia;Y estos beneficios deben derivarse de los esfuerzos de otros.Después de las deliberaciones, el jurado concluyó que ninguno de los productos vendidos a los inversores, incluidos Paycoin y los productos de inversión relacionados con la criptominería, eran contratos de inversión o valores.
Los miembros del jurado también rechazaron el reclamo de fraude, lo que le dio a Fraser una victoria completa en la defensa.
"Si bien el veredicto del jurado podría proporcionar una visión interesante del sentimiento público y la comprensión de la criptomoneda, está lejos de ser la última palabra sobre cómo se definirán las criptomonedas como una clase de activo, si es que se definirá. El veredicto también contrasta con la intensificación de actividad reguladora estatal y federal con respecto a las criptomonedas", concluyó el bufete de abogados.
