SAN FRANCISCO - Las acciones de Sunrun Inc. (NASDAQ:RUN) subieron un 3% después de que la empresa de energía solar residencial presentara unos resultados del tercer trimestre que superaron las expectativas en cuanto a instalaciones de almacenamiento, a pesar de no alcanzar los ingresos totales ni el beneficio por acción.
La compañía instaló 336,3 megavatios hora de capacidad de almacenamiento en el tercer trimestre, superando el extremo superior de su rango de orientación y representando un crecimiento interanual del 92%. La tasa de instalación de almacenamiento alcanzó el 60%, frente al 33% del año anterior.
Sin embargo, los ingresos de Sunrun en el tercer trimestre fueron de 537,2 millones de dólares, por debajo de las estimaciones de los analistas, que los situaban en 565,6 millones. Las pérdidas ajustadas por acción se situaron en 0,37 dólares, por encima de los 0,09 dólares que esperaban los analistas.
"En el tercer trimestre, volvimos a batir récords en las tasas de instalación de almacenamiento y registramos un sólido crecimiento intertrimestral de las instalaciones solares, al tiempo que aumentamos el valor neto de los abonados", declaró Mary Powell, consejera delegada de Sunrun.
La empresa instaló 229,7 megavatios de capacidad de energía solar en el tercer trimestre, en el extremo superior de sus previsiones. La capacidad de energía solar en red alcanzó los 7,3 gigavatios.
Sunrun generó 2,5 millones de dólares en efectivo en el tercer trimestre, lo que supone su segundo trimestre consecutivo de generación positiva de efectivo. La empresa reiteró su previsión de generar entre 350 y 600 millones de dólares en efectivo en 2025.
Para el cuarto trimestre, Sunrun espera instalaciones de capacidad de almacenamiento de 320-350 megavatios hora e instalaciones de capacidad de energía solar de 240-250 megavatios. La empresa prevé que el valor neto del suscriptor aumente en el cuarto trimestre en comparación con el tercero.
El fuerte crecimiento del almacenamiento y la reiteración de las perspectivas de generación de efectivo a largo plazo parecieron compensar a los inversores por la caída de los ingresos y los beneficios, lo que impulsó las acciones al alza al cierre de la sesión.
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