Arabia Saudí ha previsto que su déficit fiscal para el año 2024 aumente hasta casi el 3% de su Producto Interior Bruto (PIB). Esta previsión se produce en un momento en que el reino planea aumentar el gasto con el fin de estimular el crecimiento y alcanzar los objetivos fijados en su programa de reformas económicas Visión 2030.
La declaración preliminar del presupuesto publicada el lunes indica que se espera que el déficit alcance los 118.000 millones de riyales (32.000 millones de dólares), lo que equivale al 2,9% del PIB. Esta cifra es significativamente superior a los 79.000 millones de riyales previstos inicialmente en la declaración presupuestaria para 2024 publicada en diciembre.
A pesar de la bajada de los precios del petróleo y de los recortes voluntarios de la producción, Arabia Saudí ha mantenido una pauta de aumento del gasto. El país, que es el principal exportador de petróleo del mundo, prevé un déficit menor, del 2,3% del PIB, para el año 2025.
Naif al-Ghaith, economista jefe del Riyad Bank, comentó la evolución del presupuesto afirmando: "Tenemos más ingresos de lo que se esperaba... el gasto es donde se ha producido el aumento".
La revisión económica, conocida como Visión 2030, es un motor clave de este cambio presupuestario. El plan es ambicioso y pretende diversificar la economía del reino, alejándola de su tradicional dependencia del petróleo. Se espera que este plan de diversificación requiera importantes inversiones para cultivar nuevos sectores económicos y crear fuentes de ingresos más sostenibles.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha calculado que Arabia Saudí necesitaría que los precios del petróleo se situaran cerca de los 100 dólares por barril para equilibrar su presupuesto.
Para el año en curso, el gobierno ha previsto una vuelta al crecimiento real del PIB del 0,8%, recuperándose de la contracción del año pasado. De cara a 2025, se espera que el crecimiento del PIB se acelere hasta el 4,6%, en parte debido al aumento de la producción de petróleo.
Para 2024 se prevén unos ingresos de 1,24 billones de riyales, con un gasto público estimado en 1,36 billones de riyales. Estas cifras se han ajustado a partir de los 1,17 billones de riyales de ingresos y 1,25 billones de riyales de gastos presupuestados previamente en diciembre.
Para 2025, el gobierno ha previsto unos ingresos de 1,18 billones de riales y unos gastos de 1,29 billones. Se prevé que el gasto represente alrededor del 30% del PIB en los próximos tres años.
En el ámbito de las actividades no petroleras, el Gobierno estima un crecimiento del 3,7% en 2024, lo que supone un descenso respecto a la tasa media de crecimiento de casi el 6% de los últimos tres años.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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