La economía estadounidense mostró su resistencia en el segundo trimestre con una tasa de crecimiento estable, apuntalada por la solidez del gasto de los consumidores, según confirmó la Oficina de Análisis Económicos. El producto interior bruto (PIB) mantuvo su ritmo con una tasa anualizada del 3,0%, en línea con las previsiones de los economistas.
Se observó una revisión al alza del crecimiento del primer trimestre, que ahora se sitúa en una tasa del 1,6%, lo que supone una mejora respecto al 1,4% inicial. Este ajuste forma parte de una revisión más amplia de los datos de las cuentas nacionales que abarcan desde el primer trimestre de 2019 hasta el primer trimestre de 2024, que reveló que tanto el crecimiento económico como los beneficios empresariales en 2023 fueron más sólidos de lo que indicaban las estimaciones anteriores.
Esta revisión también ha acercado la renta interior bruta (RIB) al PIB, abordando las preocupaciones de algunos economistas que consideraban que las cifras del PIB podrían haber estado exagerando la salud de la economía. El IDG, que ofrece una perspectiva del crecimiento económico desde el punto de vista de los ingresos, experimentó un significativo ajuste al alza hasta una tasa del 3,4% en el último trimestre, un salto desde el 1,3% estimado anteriormente. El crecimiento del IDG del primer trimestre también se revisó al alza, pasando de una tasa del 1,3% a otra del 3,0%.
La diferencia entre el PIB y la IDG ha sido un punto de controversia, ya que teóricamente deberían coincidir. Sin embargo, a menudo difieren debido a las fuentes independientes de datos utilizadas para su estimación. Para ofrecer una imagen más clara de la actividad económica, también se calcula la media del PIB y la IDG, conocida como producción interior bruta. Esta medida se revisó a una tasa superior del 3,2% para el último trimestre, frente al 2,1% estimado inicialmente. En el primer trimestre, la producción interior bruta había avanzado a un ritmo del 2,3%, lo que supone una mejora respecto al 1,4% comunicado anteriormente.
Estas cifras revisadas contribuyen a matizar el panorama económico estadounidense, reflejando una economía más vigorosa de lo que se había reconocido anteriormente.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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