A medida que se acerca la temporada de resultados, JPMorgan Chase (NYSE: NYSE:JPM) y Wells Fargo (NYSE:WFC) están a punto de presentar sus resultados del tercer trimestre el viernes, con los inversores centrando su atención en las proyecciones de los ingresos netos por intereses (NII) de la banca a la luz de los recientes y sólidos datos de empleo que han arrojado incertidumbre sobre la trayectoria de recorte de tipos de la Reserva Federal.
Se prevé que las dos instituciones financieras revelen un descenso de sus beneficios en el tercer trimestre, atribuido a una contracción de los ingresos por intereses, mientras que la demanda de préstamos sigue siendo moderada. El sector bancario, que anteriormente se había beneficiado de un aumento de los ingresos netos por intereses a medida que la Reserva Federal subía los tipos, se enfrenta ahora a un revés de la fortuna.
Según Stephen Biggar, analista bancario de Argus Research, se espera que factores como el débil crecimiento de los préstamos, el aumento de los depósitos y el incremento de las provisiones para insolvencias debido al aumento de la tasa de desempleo reduzcan los márgenes y moderadamente el NII.
Betsy Graseck, de Morgan Stanley (NYSE:MS), en un informe fechado el 30 de septiembre, señalaba que con otros 150 puntos básicos de recortes de tipos previstos para mediados de 2025 y las expectativas de que la economía estadounidense eludirá una recesión, es probable que la atención se desplace rápidamente a las perspectivas de futuro.
Las divisiones de negociación pueden haberse beneficiado de un resurgimiento de la volatilidad del mercado, pero se prevé que sus ingresos disminuyan en comparación con el segundo trimestre debido a la típica lentitud estacional, como señalan los analistas de Moody's.
El sector viene lidiando desde hace tiempo con el problema de la debilidad de los préstamos a oficinas, pero los bancos han acumulado grandes reservas para cubrir posibles pérdidas. En cuanto al consumo, la morosidad de los préstamos está empezando a estabilizarse, ya que los bancos han endurecido las condiciones de suscripción en respuesta a la crisis bancaria del año pasado, según han declarado ejecutivos del sector en los últimos meses.
En cuanto a las expectativas para los seis mayores bancos de EE.UU., se prevé que JPMorgan Chase registre una caída de aproximadamente el 8% en el beneficio por acción (BPA), hasta 4,00 dólares desde 4,33 dólares, ya que el NII disminuye desde el segundo trimestre. Saul Martinez, analista de HSBC, ha pronosticado una caída del 1,2% en el NII de JPMorgan debido a la contracción de los márgenes de los depósitos y al estancamiento del crecimiento de los préstamos.
Se espera que Bank of America (NYSE:BAC) vea caer su beneficio por acción en torno a un 14%, hasta 0,77 dólares desde 0,90 dólares, cuando presente su informe el 15 de octubre. Se prevé que el BPA de Citigroup descienda casi un 20%, hasta 1,30 $ desde 1,63 $, cuando el banco presente su informe el mismo día. También se espera que el BPA de Wells Fargo caiga casi un 14%, hasta 1,28 dólares desde 1,48 dólares.
Por otro lado, se prevé que Goldman Sachs (NYSE:GS) experimente un aumento significativo del 35% en el BPA, hasta 7,36 $ desde 5,47 $, impulsado por las mejoras en la banca de inversión. Sin embargo, los ingresos por negociación podrían disminuir un 10%, según advirtió el mes pasado su Consejero Delegado, David Solomon. Se espera que Morgan Stanley registre un aumento del 14% en su beneficio por acción, hasta 1,58 dólares desde 1,38 dólares, con resultados previstos para el 16 de octubre.
Mientras los bancos se preparan para dar a conocer su salud financiera, los ojos del mercado estarán puestos en el impacto de la evolución de los tipos de interés y en la capacidad de los bancos para navegar por el cambiante panorama económico.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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