China está adoptando un novedoso enfoque de estímulo económico al destinar aproximadamente 150.000 millones de yuanes (20.700 millones de dólares) de su emisión especial de deuda a financiar un programa de intercambio de bienes de consumo. Este programa fomenta la sustitución de viejos electrodomésticos, coches, bicicletas y otros bienes, lo que representa un alejamiento de las medidas tradicionales centradas en la inversión.
Los fondos, que forman parte del billón de yuanes recaudados a través de la emisión especial de deuda de este año, pretenden reforzar la demanda de los hogares en medio de la persistente preocupación por la confianza de los consumidores, que sigue cerca de mínimos históricos.
No se espera que la asignación, equivalente al 0,12% de la producción económica de China y al 0,3% de las ventas minoristas de 2023, reequilibre significativamente la economía hacia el consumo o garantice la consecución del objetivo de crecimiento de este año, de aproximadamente el 5%.
Las autoridades están explorando nuevas estrategias para estimular la economía, desviándose del uso habitual de bonos especiales para infraestructuras e inversiones relacionadas con la seguridad. Hwabao Trust reconoce que se trata de un cambio importante, y subraya la necesidad de ampliar la demanda interna para abordar el problema principal de la débil demanda de los consumidores.
En el marco del programa de intercambio de bienes de consumo, iniciado en marzo, el Gobierno ha subvencionado hasta 2.000 yuanes para electrodomésticos y 20.000 yuanes para vehículos eléctricos sin restricciones de ingresos. A pesar de estos esfuerzos, las ventas de electrodomésticos en junio cayeron un 7,6% respecto al año anterior, y las de coches un 6,2%.
El diseño del programa ha suscitado dudas entre los analistas, que señalan que adelantar la compra de bienes duraderos puede reducir el consumo y la inversión futuros en estos sectores.
Además, preocupa que los canjes sirvan de hecho como subvenciones indirectas a los fabricantes con exceso de existencias, lo que podría crear ineficiencias en el mercado.
El economista jefe para Asia-Pacífico de S&P Global sugirió que una forma más eficiente de aumentar el bienestar de la población podría ser a través de dádivas monetarias directas en lugar de subvenciones asignadas.
Queda por ver el impacto del programa en el comportamiento de los consumidores y en la economía en general, y es posible que se adopten nuevas medidas de estímulo en una próxima reunión del politburó o más adelante si el crecimiento no mejora.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.