El Banco de la Reserva de Nueva Zelanda (RBNZ) anunció el miércoles que ha decidido mantener el tipo oficial de efectivo en el 5,5%, en línea con las predicciones de los economistas. No obstante, el banco central ha señalado que podría plantearse flexibilizar la política monetaria en el futuro si la inflación disminuye como se prevé.
En un cambio de su postura anterior, la declaración del RBNZ sugiere un enfoque más moderado, indicando que aunque la política monetaria debe seguir siendo restrictiva para gestionar la inflación, el nivel de restricción podría reducirse con el tiempo en respuesta a la disminución de las presiones inflacionistas.
Se trata de un cambio notable con respecto a la reunión de mayo, en la que el banco central había sugerido que la política seguiría siendo restrictiva durante más tiempo y no descartaba una subida de tipos si persistían las presiones inflacionistas.
Tras el anuncio, el dólar neozelandés experimentó un retroceso, cayendo un 0,74% hasta los 0,6085 $, y alcanzando un mínimo de 16 meses frente al dólar australiano. Por otra parte, los tipos swap a dos años cayeron 11 puntos básicos, hasta un mínimo de seis meses del 4,6850%, lo que sugiere que el mercado está valorando un recorte de los tipos de 25 puntos básicos ya en octubre.
El banco central también modificó su discurso sobre la inflación, afirmando ahora que cree que la política monetaria ha reducido "significativamente" la inflación de los precios al consumo. El RBNZ prevé que la inflación general vuelva al rango objetivo del 1% al 3% en el segundo semestre de este año, lo que supone una disminución con respecto al 4% registrado en el primer trimestre.
Aunque algunas presiones internas sobre los precios siguen siendo fuertes, el RBNZ observó indicios de que se espera que disminuya la persistencia de la inflación, coincidiendo con una disminución de las presiones sobre la capacidad y de las intenciones de las empresas en materia de fijación de precios.
El RBNZ ha estado a la vanguardia de la reversión de las medidas de estímulo de la era de la pandemia, habiendo aumentado los tipos en 525 puntos básicos desde octubre de 2021, marcando el endurecimiento más agresivo desde la introducción del tipo de efectivo oficial en 1999.
Estas subidas de tipos han ralentizado considerablemente la economía neozelandesa, pero datos recientes indican que el país ha salido de una recesión técnica en el primer trimestre de 2024, registrando un crecimiento del 0,2%.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.