El Banco de Italia ha revisado sus previsiones de crecimiento para la economía del país, esperando ahora una expansión del 0,7% tanto para este año como para el próximo.
Esta actualización, anunciada el viernes, supone una reducción respecto a las estimaciones realizadas en octubre, que preveían un crecimiento del 0,8% para este año y del 0,9% para 2024.
Estas previsiones revisadas quedan por debajo de las expectativas oficiales del Gobierno italiano de un crecimiento del 1,0% para este año y del 1,2% para 2025.
El Ministro de Economía, Giancarlo Giorgetti, reconoció el jueves que Italia, tercera economía de la eurozona, registrará probablemente una tasa de crecimiento del 0,7% a finales de año, alegando una importante desaceleración del sector industrial.
Las previsiones del banco central no se ajustan en función del número de días laborables al año, una práctica habitual de comparación internacional a la que se adhieren el Gobierno, la Unión Europea y otros organismos internacionales.
Sin embargo, al realizar dicho ajuste, el Banco de Italia indicó que el crecimiento para este año se situaría en torno al 0,5%, con un aumento al 1% para el año siguiente. Esto sugiere que se espera que la economía italiana experimente un estancamiento en el último trimestre del año, lo que coincide con la reciente previsión para 2024 de la oficina nacional de estadística ISTAT.
En cuanto a la inflación, el Banco de Italia prevé que la tasa de inflación media armonizada de la UE para Italia será del 1,1% este año, en consonancia con su proyección de octubre.
De cara a 2025, se prevé que la inflación aumente hasta el 1,5%, ligeramente por debajo de la anterior estimación del 1,6%.
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