El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha revisado su previsión de crecimiento para la economía del Reino Unido en 2024, citando una menor inflación y un reciente recorte de los tipos de interés del Banco de Inglaterra. La actualización de la previsión supone un posible espaldarazo para la ministra de Economía, Rachel Reeves, que se prepara para presentar su primer presupuesto anual el 30 de octubre.
Según la actualización trimestral de las previsiones globales del FMI, el producto interior bruto (PIB) del Reino Unido crecerá un 1,1% en 2024, lo que supone un aumento respecto al 0,7% estimado anteriormente en julio. El FMI, sin embargo, mantuvo su previsión de crecimiento para 2025, lo que puede limitar el potencial alcista para Reeves en términos de mayores ingresos fiscales.
Reeves, que es miembro del Partido Laborista, expresó su aprobación por la mejora de las previsiones del FMI para 2024. Hizo hincapié en su compromiso de aplicar medidas presupuestarias destinadas a reforzar las finanzas públicas y apoyar a los trabajadores, el Servicio Nacional de Salud (NHS) y la infraestructura económica del país.
Las previsiones del FMI sitúan al Reino Unido en camino de alcanzar la tercera tasa de crecimiento más rápida de las economías avanzadas del Grupo de los Siete (G7), posición que comparte con Francia. Esto representa una mejora con respecto a julio, cuando el Reino Unido estaba empatado en la cuarta posición con Japón e Italia.
A pesar de las perspectivas positivas para 2024, la previsión del FMI para el crecimiento económico del Reino Unido sigue siendo menos optimista que la de la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria para 2025. El FMI prevé una inflación media del 2,6% en 2024, la segunda más alta del G7 después de Estados Unidos, y del 2,1% en 2025, lo que se aproxima al objetivo del 2% fijado por el Banco de Inglaterra.
La economía británica experimentó un modesto crecimiento del 0,3% el año pasado y sufrió una recesión poco profunda en el segundo semestre. Sin embargo, ha mostrado un repunte relativamente fuerte en el primer semestre de 2024. Tras un recorte de tipos de un cuarto de punto hasta el 5% en agosto, los mercados anticipan que el Banco de Inglaterra podría reducir aún más los costes de endeudamiento el mes que viene, dado que la inflación cayó a mínimos de tres años del 1,7% en septiembre.
Ajustados al crecimiento demográfico, los resultados económicos del Reino Unido son menos sólidos. El FMI calcula que el PIB per cápita aumentará un 0,6% este año y un 1,1% el que viene, lo que no alcanza la ambición de Reeves de que el Reino Unido lidere el G7 en esta métrica durante dos años consecutivos.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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