La Reserva Federal ha ajustado sus perspectivas de tipos de interés, y ahora prevé aplicar un único recorte de tipos este año, en contraste con los tres recortes de tipos previstos anteriormente en marzo. Esta decisión se debe a que la inflación se acerca al objetivo del 2% de la Reserva Federal más lentamente de lo previsto. Los responsables políticos del banco central han mantenido el tipo de interés oficial estable en el 5,25%-5,5% desde el pasado mes de julio, con el objetivo de frenar la elevada inflación sin dañar significativamente el mercado laboral.
Durante la reciente reunión que concluyó el miércoles, la Fed publicó nuevas proyecciones económicas, que sugieren que el tipo de interés oficial bajará al 4,1% a finales de 2025, lo que indica cuatro reducciones de tipos de un cuarto de punto el año que viene. En marzo, la previsión era que el tipo oficial se situara entre el 3,75% y el 4% a finales de 2025, sobre la base de al menos tres recortes de 25 puntos básicos cada año en 2024 y 2025.
El cambio en el calendario de recortes de tipos refleja una recalibración por parte de los responsables de la fijación de tipos en EE.UU. debido a una serie de cifras de inflación más altas de lo esperado a principios de este año, que pusieron de relieve una economía más resistente a los altos costes de endeudamiento de lo previsto. No obstante, los datos de mayo, según los cuales los precios al consumo se mantuvieron sin cambios con respecto a abril, no parecen influir en las previsiones actualizadas de la Reserva Federal.
Cuatro responsables de la Reserva Federal creen ahora que no debería haber recortes de tipos este año, frente a los dos que opinaban lo mismo hace tres meses. Siete funcionarios esperan un único recorte de tipos para finales de año, mientras que ocho prevén la necesidad de dos recortes.
Las previsiones revisadas de la Reserva Federal también incluyen un ligero repunte de la inflación prevista, con una tasa para el cuarto trimestre del 2,6%, frente al 2,4% previsto en marzo. El índice de precios de los gastos de consumo personal, la medida de inflación preferida de la Reserva Federal, ha registrado un aumento del 2,7% en los últimos meses.
Se prevé que la inflación subyacente del PCE, que excluye los volátiles precios de los alimentos y la energía, se sitúe en el 2,8% en el cuarto trimestre de 2024, y en el 2,3% en el cuarto trimestre de 2025. Estas cifras son ligeramente superiores a las previsiones de marzo, del 2,6% para 2024 y del 2,2% para 2025.
Los responsables políticos del banco central siguen previendo un "aterrizaje suave" de la economía, con una desaceleración gradual y una relajación de la inflación sin un aumento significativo del desempleo. Sin embargo, se espera que la tasa de desempleo aumente ligeramente hasta el 4,2% a finales de 2025, frente al 4,1% previsto en marzo.
La Reserva Federal también ha revisado su estimación del tipo neutral a largo plazo, que es el tipo de interés que no estimula ni frena una economía sana, hasta el 2,8% desde el 2,6% de marzo y el 2,5% de diciembre. Este ajuste sugiere que la Fed podría no reducir los tipos tanto como se pensaba.
Las previsiones de crecimiento de la economía estadounidense se mantienen sin cambios, con expectativas de crecimiento del 2,1% este año y del 2,0% el próximo.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.