Los mercados mundiales afrontan una semana crucial con una serie de acontecimientos clave que podrían configurar el panorama económico y político. En Estados Unidos, la atención se centra en los acontecimientos políticos, la publicación de datos económicos y un posible cambio en la política monetaria, mientras que Europa se prepara para los resultados empresariales y las reuniones de los bancos centrales.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, tiene previsto hablar en Washington el lunes, lo que podría ofrecer pistas sobre la futura dirección de la política del banco central en medio de un aumento de la inflación y los tipos de interés. El mercado anticipa un posible recorte de tipos por parte de la Fed ya en septiembre, y se espera que los datos de ventas minoristas del martes ofrezcan una imagen más clara de la confianza y el gasto de los consumidores ante el enfriamiento de la economía.
Los inversores también seguirán de cerca los informes de resultados de los principales bancos: Goldman Sachs (NYSE:GS) publicará sus resultados el 15 de julio, seguido de Bank of America (NYSE:BAC) y Morgan Stanley (NYSE:MS) al día siguiente. Estos resultados podrían ser indicativos de la salud y resistencia del sector financiero.
La dinámica política también está en el punto de mira, con el Presidente Joe Biden enfrentándose a una creciente presión en relación con su candidatura a la reelección. Mientras tanto, el lunes dará comienzo la Convención Nacional Republicana, en la que el ex presidente Donald Trump será nominado oficialmente.
Al otro lado del Atlántico, es probable que el Banco Central Europeo (BCE) mantenga los tipos de interés el jueves, tras su primer recorte de tipos en cinco años el mes pasado. Con la inflación de la zona euro mostrando señales mixtas, se espera que el BCE se muestre cauto a la hora de señalar nuevos recortes de tipos antes de su reunión de septiembre.
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, se referirá probablemente a si el banco está dispuesto a intervenir en los mercados de bonos en caso necesario, aunque se considera improbable que lo haga sin que se produzcan turbulencias significativas en los mercados.
En el Reino Unido, está previsto que el rey Carlos anuncie el programa legislativo del nuevo Gobierno laborista del primer ministro Keir Starmer el miércoles a las 1200 GMT. Antes, los inversores analizarán los datos de inflación británicos publicados ese mismo día, que recientemente se alinearon con el objetivo del 2% del Banco de Inglaterra.
Sin embargo, el banco central se mantiene vigilante sobre los precios de los servicios, que han estado subiendo. Además, los datos sobre el empleo en el Reino Unido que se publicarán el jueves serán fundamentales para evaluar las tendencias del crecimiento salarial.
La agenda económica de China también estará bajo escrutinio, ya que el lunes comienza el tercer pleno, un importante acontecimiento que se produce aproximadamente cada cinco años. Se espera que la reunión se centre en importantes reformas fiscales destinadas a redistribuir los ingresos entre los gobiernos regionales.
Se darán a conocer los principales indicadores económicos chinos, como el PIB, las ventas minoristas y la producción industrial, que proporcionarán un indicador de la evolución económica del país en medio de la preocupación por la demanda interna y el sector inmobiliario.
En Europa, las ganancias de los gigantes tecnológicos serán el centro de atención, ya que está previsto que el fabricante holandés de semiconductores ASML y la empresa alemana de software SAP presenten sus resultados. El rendimiento de las grandes empresas tecnológicas ha influido mucho en los índices bursátiles, y sus resultados podrían tener un impacto significativo en el sentimiento del mercado.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.