Los mercados bursátiles chinos experimentaron un retroceso el miércoles, al no verse satisfechas las expectativas de los inversores de un impulso económico tras la falta de nuevos anuncios de estímulo por parte de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China.
Tanto el Shanghai Composite como el CSI300 registraron caídas en torno al 3%. Este cambio en el ánimo de los inversores también afectó al mercado de materias primas: los futuros del crudo Brent se estabilizaron en 77,79 dólares el barril tras una caída del 4,6% el día anterior, y los precios del mineral de hierro encontraron apoyo en 106 dólares en Singapur tras una caída del 5% el martes.
En cambio, los mercados asiáticos mostraron cierta resistencia. El índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón subió un 0,6%, y las acciones de Hong Kong experimentaron un importante repunte de alrededor del 2%, una marcada recuperación tras su mayor caída desde 2008 el martes.
El dólar neozelandés se debilitó un 0,6% en respuesta a la decisión del Banco de la Reserva de Nueva Zelanda (RBNZ) de recortar los tipos de interés en 50 puntos básicos, señalando una postura prudente sobre las perspectivas económicas y dejando abierta la posibilidad de nuevas bajadas de tipos. El kiwi cotizaba a un mínimo de siete semanas de 0,6096 dólares, rondando su media móvil de 200 días.
En Japón, el índice Nikkei subió un 1%, con las acciones de Seven & I Holdings subiendo al conocerse una posible oferta de compra elevada por parte del minorista canadiense Alimentation Couche-Tard.
En cuanto a Estados Unidos, los futuros de las acciones estadounidenses se mantuvieron estables en Asia, tras un comportamiento positivo en la sesión anterior. Los funcionarios de la Reserva Federal se mostraron optimistas sobre la gestión de los niveles de los tipos de interés para lograr un aterrizaje económico suave. El presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, destacó el sólido informe de empleo de septiembre y la posibilidad de reducir los tipos con el tiempo debido a la caída de la inflación.
Las expectativas del mercado sobre un recorte de los tipos de la Reserva Federal en noviembre han cambiado, con una probabilidad del 88% de una reducción de 25 puntos básicos. Los rendimientos del Tesoro estadounidense se estabilizaron, con los rendimientos a dos años en el 3,96% y a 10 años en el 4,01%.
La subida de los rendimientos fortaleció al dólar, que cotizó a 1,0968 dólares por euro y a 148,25 yenes. El dólar australiano se debilitó ligeramente a 0,6738 dólares, con los operadores considerando la posibilidad de nuevos recortes de tipos por parte del RBNZ.
Los inversores esperan ahora las actas de la reunión de septiembre de la Reserva Federal, en la que se recortaron los tipos en 50 puntos básicos, así como las próximas comparecencias de los responsables de la Fed Raphael Bostic, Lorie Logan y Mary Daly.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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