El Gobernador de la Reserva Federal, Christopher Waller, hizo hincapié en la necesidad de actuar con cautela a la hora de reducir los tipos de interés, dados los recientes datos económicos. En su intervención del lunes en la conferencia del Shadow Open Market Committee celebrada en la Hoover Institution de la Universidad de Stanford, Waller señaló los signos de aumento de la inflación y de solidez de la economía y el mercado laboral estadounidenses, que parecen más fuertes de lo que se creía.
Waller sugirió que la Reserva Federal debería adoptar un "ritmo deliberado" en el ajuste del tipo de interés oficial, especialmente tras el recorte de medio punto porcentual en septiembre, mayor de lo previsto. En su opinión, mientras el mercado laboral se mantenga estable y la inflación tienda a la baja, está justificada una reducción gradual del tipo de interés oficial durante el próximo año.
Según Waller, la situación actual de la economía indica que la política monetaria debería ser más moderada en su relajación. Destacó que las recientes revisiones económicas muestran un gasto doméstico continuado y sugirió que unos tipos más bajos podrían desbloquear la "demanda reprimida" de artículos caros. Waller afirmó que los próximos datos económicos sobre la inflación, el trabajo y la actividad económica en general orientarían su postura cautelosa sobre la relajación de la política monetaria.
Waller también mencionó factores externos que podrían afectar temporalmente a las estadísticas del mercado laboral, como los recientes huracanes y la huelga de Boeing Inc (NYSE:BA), que podrían reducir las ganancias de empleo de octubre en unas 100.000 personas. Sin embargo, espera que el crecimiento del empleo se ralentice gradualmente, y que la tasa de desempleo aumente, aunque seguirá siendo históricamente baja.
En caso de que la inflación aumente inesperadamente, Waller señaló que la Reserva Federal podría detener los recortes de tipos. Por el contrario, si la inflación cae por debajo del objetivo del 2% o el mercado de trabajo se deteriora bruscamente, podría plantearse recortes de tipos más agresivos.
Waller concluyó expresando el consenso entre los responsables políticos en favor de una retirada gradual de la política acomodaticia, siempre que la economía mantenga su trayectoria actual. El objetivo es avanzar hacia una política neutral sin obstaculizar innecesariamente el crecimiento económico.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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