CIUDAD DE MÉXICO, 1 nov (Reuters) - La estadounidense McDermott International espera que la plataforma Abkatún-A2, con valor de 454 millones de dólares y construida para la estatal mexicana Pemex, entre en operaciones en abril en aguas someras del Golfo de México, dijo el jueves un ejecutivo de la firma de ingeniería petrolera.
La instalación, la más grande construida en México en la última década, está diseñada para procesar un tope de 220,000 barriles diarios de petróleo y 352 millones de pies cúbicos de gas por día, producidos en los campos de Campeche, incluido el prolífico Ku-Maloob-Zaap.
La plataforma será trasladada este mes desde el patio de fabricación de McDermott MDR.N en el norteño estado Tamaulipas a la llamada Sonda de Campeche. Reemplazará a una que se quemó en un accidente en 2016, dijo en entrevista telefónica Alfredo Carvallo, director general de la unidad de McDermott en México.
"McDermott está ciento por ciento verticalmente integrada. Hicimos la ingeniería -que se hizo aquí en México-, la compra (de insumos), la fabricación, el transporte e instalación. Entregaremos la plataforma ya en operación", dijo.
Pemex está batallando para mantener su producción de hidrocarburos, que ha caído constantemente en los últimos años hasta 1.8 millones de barriles por día (bpd), impulsando la exploración y explotación en aguas poco profundas, donde están sus principales activos petroleros.
McDermott, que ha construido 10 plataformas en la última década para Pemex y está trabajando en dos proyectos de infraestructura adicionales para la estatal, ha estado usando su centro en Altamira para construir plataformas para petroleras en otras partes del continente como Trinidad & Tobago en el Caribe.
La firma dijo esta semana que la brasileña con participación estatal Petrobras (NYSE:PBR) PETR4.SA le adjudicó un contrato para diseñar y construir un ducto asociado con un sistema de exportación de gas en el área pre-sal de la cuenca de Santos. También anunció que planea vender su negocio global de tanques de almacenamiento y fabricación de ductos en Estados Unidos. (Reporte de Ana Isabel Martínez y Marianna Párraga, Editado por Manuel Farías)