BOGOTÁ, 17 ene (Reuters) - Dos militantes del partido político de las FARC fueron asesinados a tiros por hombres armados en un pueblo del noroeste de Colombia en momentos en que realizaban proselitismo con la comunidad para las elecciones legislativas de marzo, informaron el miércoles autoridades y el exgrupo guerrillero.
El crimen de los excombatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se produjo el martes en la noche en el municipio de Peque, en el departamento de Antioquia, a dos meses de las votaciones legislativas en las que participará por primera vez el naciente partido político que surgió de la guerrilla.
"Las y los excombatientes de las FARC-EP e integrantes de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común han sido objeto de la constante persecución por parte de actores armados que buscan desestabilizar la implementación de los acuerdos de paz y generar temor y zozobra de quienes hoy creemos en el camino de la reconciliación", dijo el partido político en un comunicado.
Las FARC firmaron en Cuba a finales del 2016 un acuerdo de paz con el Gobierno para poner fin a una violenta confrontación que en más de medio siglo ha dejado más de 220.000 muertos.
Con el acuerdo más de 11.000 excombatientes dejaron las armas y conformaron el partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (cuyas siglas también son FARC), que presentará a su antiguo líder Rodrigo Londoño como candidato presidencial para las elecciones de mayo.
Dirigentes de las FARC han expresado su temor por una campaña sistemática para asesinar a militantes y dirigentes del naciente partido político, como sucedió con la Unión Patriótica, una organización de izquierda que perdió a unos 5.000 de sus integrantes en ataques a atribuidos a paramilitares de ultraderecha desde que se fundó en 1985.
De acuerdo con las FARC, 36 excombatientes han sido asesinados desde que se firmó el acuerdo de paz, además de 13 familiares de integrantes del nuevo partido.
La Misión de Verificación de la ONU condenó el asesinato, lo calificó como el "primer atentado mortal en el marco del proceso electoral del 2018" y le pidió al Gobierno ofrecer las garantías de seguridad para los líderes y militantes del partido. (Reporte de Luis Jaime Acosta. Editado por Carlos Aliaga)