México, 14 ago (EFE).- El excandidato presidencial izquierdista Andrés Manuel López Obrador calificó hoy de "nefasta" la propuesta de reforma energética enviada al Senado por el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, y dijo que la iniciativa es impulsada por "ladrones" y "corruptos".
"En la iniciativa que presentan no encuentras (...) la palabra corrupción, no existe, y el principal problema de Petróleos Mexicanos (Pemex, estatal) es la corrupción. Es el principal problema del país", dijo a la emisora MVS el excandidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y actual líder de la plataforma Movimiento de Renovación Nacional (Morena).
López Obrador dijo que la corrupción "significa como un 50 % de los costos en el caso del petróleo" en México y que hace falta poner más énfasis en combatirla.
"Si se termina con la corrupción se liberan fondos para el desarrollo. Se va mucho dinero del presupuesto público por el caño de la corrupción", agregó.
López Obrador se mostró particularmente crítico con los llamados "contratos de utilidad compartida" previstos en la iniciativa gubernamental, en los cuales se aprueba "compartir la ganancia del pueblo de México", lo que a cambio de ganancias inmediatas generará un daño para las generaciones futuras.
El dirigente de la izquierda mexicana dijo que las empresas extranjeras que desean participar en este esquema "saben muy bien dónde está el petróleo" desde hace décadas, y consideró que quien "entrega los recursos naturales del país a extranjeros es traidor a la patria".
Para López Obrador, si prospera la iniciativa de reforma energética en el Congreso mexicano a partir de septiembre, la situación en su país "va a ser un desastre"
"Sé que lo que va a ocasionar es más agravamiento económico, más crisis de bienestar social, y mayor inseguridad y violencia. Vale más decirlo para que tratemos de evitar que se lleve a cabo este robo", señaló.
El líder de Morena y aspirante presidencial en 2006 y 2012 cuestionó también el plan de sacar "más petróleo" del subsuelo sin potenciar antes los sectores petroquímico y de refinación.
En su campaña contra la iniciativa López Obrador convocó esta semana a sus seguidores a participar en una asamblea el próximo 8 de septiembre en el Zócalo (plaza central) de la capital mexicana, un acto que se prevé que sea el inicio de un movimiento de protesta contra la reforma energética en las calles.
Sobre este evento, el también exalcalde de Ciudad de México dijo que allí estará "informando de que esto es grave" y cumpliendo con su deber de alertar a los mexicanos de que los cambios "van a terminar de destruir al país".
Por último se mostró convencido de que el que considera "el robo del siglo" se puede parar si la gente toma conciencia del agravio y se opone a los cambios constitucionales.
Anticipó que las movilizaciones que encabezará en las calles no generarán violencia: "Nuestro movimiento ha sido, es y seguirá siendo pacífico", agregó. EFE