Por Howard Schneider
WEST PALM BEACH, EEUU, 17 abr (Reuters) - El presidente de la Reserva Federal de Atlanta, Dennis Lockhart, dijo el jueves que los recientes datos "turbios" del primer trimestre lo llevan a oponerse a una subida de los tipos de interés en junio, pero añadió que confía en que la economía se mantendrá bien encaminada.
"Me inclinaría más por un poco más tarde que por un poco más temprano", dijo Lockhart, añadiendo que un informe débil de empleo de marzo y otros factores están haciendo a la economía difícil de interpretar.
Agregó que espera que las señales de debilidad sean transitorias, pero quiere más evidencia para estar seguro.
"No creo que sea una decisión dura en la que arriesgamos mucho al ir con una fecha sobre la otra. No descarto junio, pero no es de mi preferencia", afirmó Lockhart.
Sus declaraciones a periodistas luego de un almuerzo con líderes empresariales en West Palm Beach, Florida, se sumaron a la impresión de que la Fed podría posponer su inicial alza de tasas hacia el otoño boreal, una expectativa ya fuerte entre inversores y muchos economistas.
El banco central estadounidense ha dicho que evaluará la posibilidad de incrementar la tasa en cada uno de sus encuentros trimestrales a partir de junio. No ha subido los tipos desde el 2006 y su tipo clave de endeudamiento ha estado en cerca de cero desde casi fines del 2008, como parte de un esfuerzo de reparar el daño causado por la crisis financiera del 2007-2009 y la recesión.
Lockhart, miembro con derecho a voto este año en el comité que fija los tipos en la Fed, dijo que pensaba que era poco probable que en los próximos dos meses surgiera evidencia suficientes que le hiciera confiar en un avance de la economía hacia las metas del banco central de pleno empleo y una inflación en un nivel cercano pero menor al 2 por ciento.
La inflación, en particular, es débil. Si bien Lockhart dijo que no necesita ver un alza de la inflación para votar por un aumento de los tipos, "preferiría una fecha posterior" (...) Me gustaría ver más evidencia positiva".
Los funcionarios de la Fed están divididos sobre la cuestión de si elevar los tipos en breve, o tal vez de una manera más gradual, o en una fecha posterior, y tal vez de una forma más marcada.
Algunos, como la presidenta de la Fed de Cleveland, Loretta Mester, se inclinan por un alza temprana. Hablando en Nueva York el jueves, Mester advirtió que esperar demasiado podría desestabilizar a los mercados financieros.
El presidente de la Fed de Boston, Eric Rosengren, hablando en Londres también el jueves, cuestionó el "apuro" para subir los tipos, diciendo que ve que la inflación permanecería por debajo del 2 por ciento durante varios años.
En tanto, el vicepresidente de la Fed Stanley Fischer, hablando en la cadena CNBC, vinculó el momento de un alza de los tipos a la cuestión de cuán rápido podrá repuntar la economía. "Intentaremos hacerlo en el mejor momento posible y quisiéramos ver a la economía comenzando a crecer de nuevo", afirmó.
Los datos de empleo de marzo, dijo Lockhart, podrían indicar que el ritmo de mejora en el mercado laboral se está desacelerando, aunque afirmó que la economía en su conjunto parece estar continuando con su recuperación con un crecimiento por encima de la tendencia que podría alcanzar el 3 por ciento este año.
"Un panorama económico turbio no es una circunstancia ideal para tomar una decisión política importante", dijo Lockhart. Pero, "a pesar de la debilidad reciente, no creo que la economía esté fallando, se esté estancando o se esté desacelerando de alguna manera fundamental", agregó.