por Fernanda Celis
Infosel, noviembre. 17.- La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), que ve por las condiciones de ese sector, reiteró que la prohibición de cigarros electrónicos favorece la venta ilegal de estos productos a menores, la evasión del fisco y fortalece las bandas delincuenciales.
Por ello, el organismo pidió al gobierno una "correcta regulación" de la venta de dichos aparatos, lo que también generaría oportunidades de negocios y empleos, lo cual ayudaría a la reactivación económica, de acuerdo con un comunicado.
"Resulta obvio que es necesario derogar el decreto de prohibición para abrir un espacio incluyente al diálogo informado que involucre a todas las partes afectadas e implicadas: consumidores, autoridades, académicos, comerciantes, productores, para que esto nos permita arribar a los consensos necesarios con los cuales sea posible establecer un marco regulatorio que brinde certeza al consumidor respecto a los productos que compra y consume", dijo Cuauhtémoc Rivera, presidente de Anpec. "Elevar a rango Constitucional la prohibición es un contrasentido; la libre elección es una garantía individual consagrada".
En febrero de este año, un decreto del presidente Andrés Manuel López Obrador prohibió la importación y exportación de cigarros electrónicos, vapeadores y sistemas similares.
Grandes tabacaleras como Philip Morris (NYSE:PM) International (PMI), dueña de las marcas Marlboro y Chesterfield, han intentado echar para atrás dicho decreto a través de recursos legales y también mediante el diálogo.
Para Philip Morris que México no les permita vender este tipo de dispositivos se contrapone a sus planes a largo plazo, ya que diversos países han endurecido con el paso de los años sus políticas en contra de los cigarrillos por cuestiones de salud y la manera que las tabacaleras pretenden mantener productos con nicotina en los estantes de las tiendas es a través de los cigarros electrónicos o vapeadores.
Infosel, noviembre. 17.- La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), que ve por las condiciones de ese sector, reiteró que la prohibición de cigarros electrónicos favorece la venta ilegal de estos productos a menores, la evasión del fisco y fortalece las bandas delincuenciales.
Por ello, el organismo pidió al gobierno una "correcta regulación" de la venta de dichos aparatos, lo que también generaría oportunidades de negocios y empleos, lo cual ayudaría a la reactivación económica, de acuerdo con un comunicado.
"Resulta obvio que es necesario derogar el decreto de prohibición para abrir un espacio incluyente al diálogo informado que involucre a todas las partes afectadas e implicadas: consumidores, autoridades, académicos, comerciantes, productores, para que esto nos permita arribar a los consensos necesarios con los cuales sea posible establecer un marco regulatorio que brinde certeza al consumidor respecto a los productos que compra y consume", dijo Cuauhtémoc Rivera, presidente de Anpec. "Elevar a rango Constitucional la prohibición es un contrasentido; la libre elección es una garantía individual consagrada".
En febrero de este año, un decreto del presidente Andrés Manuel López Obrador prohibió la importación y exportación de cigarros electrónicos, vapeadores y sistemas similares.
Grandes tabacaleras como Philip Morris (NYSE:PM) International (PMI), dueña de las marcas Marlboro y Chesterfield, han intentado echar para atrás dicho decreto a través de recursos legales y también mediante el diálogo.
Para Philip Morris que México no les permita vender este tipo de dispositivos se contrapone a sus planes a largo plazo, ya que diversos países han endurecido con el paso de los años sus políticas en contra de los cigarrillos por cuestiones de salud y la manera que las tabacaleras pretenden mantener productos con nicotina en los estantes de las tiendas es a través de los cigarros electrónicos o vapeadores.