Los ministros de Comercio y Comercio de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur se han comprometido a reforzar la cooperación estratégica para impulsar la seguridad y la prosperidad económica. La Secretaria de Comercio de EE.UU., Gina Raimondo, junto con sus homólogos, el ministro japonés de Economía, Comercio e Industria, Ken Saito, y el ministro surcoreano de Comercio, Industria y Energía, Ahn Duk-geun, asumieron este compromiso durante una reunión celebrada el miércoles en Washington.
La reunión, que es la primera de este tipo desde que los líderes de los tres países acordaron en agosto en Camp David mejorar la colaboración, se centró en áreas como la seguridad de la inteligencia artificial, el control de las exportaciones, la energía limpia y las cadenas de suministro de semiconductores. Raimondo destacó la importancia de la asociación trinacional para liderar la fabricación, los servicios, la tecnología y la innovación mundiales, afirmando que es crucial para la seguridad del mundo.
Los ministros anunciaron planes para priorizar los esfuerzos conjuntos en áreas estratégicas para mejorar la seguridad y la prosperidad de sus naciones y de la región Indo-Pacífica. Pretenden reforzar la resistencia de las cadenas de suministro, especialmente en semiconductores y baterías, y cooperar en cuestiones como los minerales críticos, la ciberseguridad y el establecimiento de normas técnicas.
Saito destacó el acuerdo para trabajar en pro de una cadena de suministro sólida y fiable de materiales estratégicos y diseñar mercados en los que se evalúen factores más allá del precio. Esta iniciativa se produce cuando el Presidente Joe Biden anunció el mes pasado un aumento de los aranceles sobre los minerales críticos procedentes de China, lo que supone una medida para reducir el control chino sobre estas cadenas de suministro esenciales.
En marzo, un funcionario del Departamento de Comercio estadounidense reveló que Estados Unidos estaba instando a sus aliados a impedir que las empresas nacionales prestaran servicio a equipos específicos de fabricación de chips para clientes chinos, como parte de los esfuerzos para limitar las capacidades de fabricación de semiconductores de China.
Ahn expresó su esperanza de que la reunión trilateral sirviera de plataforma fundacional para profundizar y ampliar la cooperación industrial entre las tres naciones y para abordar conjuntamente los riesgos globales. La colaboración supone un paso importante en los esfuerzos internacionales por garantizar los intereses económicos y de seguridad ante la evolución de los retos mundiales.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.