por Michelle del Campo
Infosel, octubre. 25.- Trabajadores de General Motors (NYSE:GM) en Estados Unidos levantaron la histórica huelga que mantenían desde hace más de un mes en contra la automotriz, tras ratificar los acuerdos pactados con United Automobile Workers (UAW), el principal sindicato del sector en ese país.
Los trabajadores volverán a sus labores de producción cuando GM lo indique, luego de aprobar las condiciones que regirán su relación con la empresa durante los próximos cuatro años y obtener compromisos de inversión y producción en Estados Unidos, valuados en casi ocho mil millones de dólares.
"GM se enorgullece de proporcionar empleos bien remunerados a decenas de miles de empleados en Estados Unidos y de aumentar nuestra inversión sustancial en Estados Unidos", dijo Mary Barra, directora general de GM, en un comunicado. "Como un solo equipo, podemos avanzar y mantenernos enfocados en nuestras prioridades de seguridad y en la construcción de automóviles de alta calidad, camiones y crossovers para nuestros clientes".
La ratificación del acuerdo pone fin a la huelga más duradera del sector automotriz de los últimos 50 años en Estados Unidos --40 días--, lo que desencadenó paros en otras plantas de Canadá y México por falta de componentes, demostrando así el nivel de interdependencia que existe en el sector automotriz en América del Norte.
Laboralmente, los trabajadores ganaron incrementos salariales de 3% a 4% cada año, el mantenimiento de las condiciones de cobertura de atención medica, un bono de 11 mil dólares para empleados regulares y otro de cuatro mil 500 dólares para temporales, mayor participación en las ganancias de la empresa, y un camino claro para que los colaboradores temporales puedan sumarse a las filas de asalariados luego de tres años de servicio.
"Los miembros de General Motors han hablado", dijo Terry Dittes, vicepresidente de UAW y director del departamento de UAW-GM, en otro comunicado. "Todos estamos increíblemente orgullosos de los miembros de UAW-GM que capturaron los corazones y las mentes de una nación. Su sacrificio y su valiente posición abordaron la estructura salarial de dos niveles y la clasificación permanente de trabajadores temporales que ha afectado a los estadounidenses de clase trabajadora".
Adicionalmente, el compromiso de la automotriz con su trabajadores considera inversiones por siete mil 700 millones de dólares por parte de GM en su país sede, que incluyen recursos para producir una nueva pickup eléctrica en la planta de Detroit-Hamstramck y ampliar sus programas de producción de vehículos en sus plantas estadounidenses.
La empresa analizará futuras inversiones para la creación de empleos en Mahoning Valley en Ohio, mediante iniciativas como la producción ahí de células de baterías, un proyecto que crearía mil posiciones laborales.
GM también se comprometió a vender su planta de Lordstown a Lordstown Motors, una nueva empresa que planea construir pickups eléctricas para flotillas comerciales.
En México el fin de la huelga representará la reactivación de las plantas de General Motors en Silao, en el estado de Guanajuato, que desde el 1 de octubre se encuentra en paro técnico; así como de diversas unidades de producción en el complejo de la empresa en Ramos Arizpe, en Coahuila.
Los problemas en ambos centros afectaron la producción de modelos como Cheyenne, Silverado, GMC Sierra y Blazer, así como de algunos motores y transmisiones que la empresa elabora aquí.
En Canadá, la huelga afectó operaciones como las realizadas en Oshawa y St. Catharines, ambas plantas en la provincia de Ontario
No es claro si el levantamiento de los paros técnicos serán inmediatos o tomarán algunos días.
Proveedores mexicanos de la compañía como Rassini o Nemak también resultaron perjudicados por la huelga. En ese sentido, la semana pasada Nemak dijo estar preparada para reanudar su suministro a su cliente GM, en cuanto la compañía le diera "luz verde".
