CIUDAD DE MÉXICO, 22 nov (Reuters) - La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dijo el martes que presentó ante la Corte Interamericana el caso de tres personas presuntamente desaparecidas por militares en México en el marco del combate al narcotráfico, como una muestra de los abusos cometidos por fuerzas de seguridad en los últimos años.
El caso le da a la Corte Interamericana, con sede en Costa Rica, la posibilidad de pronunciarse sobre otras violaciones conexas derivadas de las amenazas y hostigamientos que sufren los núcleos familiares de las víctimas desaparecidas, dijo la CIDH en un comunicado.
Nitza Paola Alvarado Espinoza, José Ángel Alvarado Herrera y Rocío Irene Alvarado Reyes desaparecieron el 29 de diciembre del 2009 luego de ser detenidos por militares en el estado de Chihuahua, en la frontera con Estados Unidos, en los años más cruentos de la campaña contra el narcotráfico iniciada por el ex presidente Felipe Calderón (2006-2012).
"Los hechos del caso constituyen un ejemplo de los factores que contribuyen a que esta grave violación de derechos humanos tenga lugar en dicho contexto y que no sea debidamente investigada y sancionada como consecuencia de múltiples mecanismos de encubrimiento y obstrucción", señaló la CIDH.
Las tres personas fueron detenidas en un poblado de Chihuahua, donde los militares buscaban a quienes habían asesinado días atrás a agentes federales en medio de pugnas entre los cárteles de la droga de Juárez y de Sinaloa. Hasta la fecha se desconoce su paradero.
La Comisión Interamericana remitió el caso a la Corte porque considera que México no cumplió con sus recomendaciones, como realizar una investigación imparcial de los hechos y sancionar a los responsables.
Los militares mexicanos, así como efectivos de la Marina, acumulan acusaciones de violaciones a los derechos humanos tales como ejecuciones extrajudiciales y desapariciones principalmente desde 2007, cuando Calderón comenzó a sacarlos a las calles para combatir a los violentos cárteles del narcotráfico. (Reporte de Anahí Rama; Editado por Ricardo Figueroa)