CIUDAD DE MÉXICO, 2 mayo (Reuters) - El presidente de Grupo México, Germán Larrea, dijo que colaborará con el Gobierno en un nuevo intento por recuperar los restos de unos 60 trabajadores que perecieron en un accidente en una mina de la empresa en 2006, pero advirtió que el intento por recuperar entonces los cuerpos fue de "muy alto riesgo".
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo el miércoles que se reiniciarían las excavaciones en la mina de carbón Pasta de Conchos, en el norteño estado de Coahuila, luego de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) fijó un plazo de cuatro meses para responder a familiares de las víctimas, que por años han exigido el rescate de los cuerpos.
Larrea, uno de los hombres más ricos de México y que se mantiene alejado de los reflectores y los medios, dijo en una carta a López Obrador que reconocía el "espíritu humanista" de la decisión, pero advirtió que en su momento el intento de rescate fue infructuoso. tuve la oportunidad de informarle, las labores de recuperación de los cuerpos fue una tarea dura y de muy alto riesgo durante 14 meses", dijo Larrea, en la misiva, que la oficina del presidente hizo pública.
"Cada día fueron incrementándose los riesgos para las cuadrillas de rescatistas, de manera que dejó de ser humanamente posible. No podíamos poner en ese alto riesgo vidas humanas para recuperar los restos de los mineros", destacó y añadió que tras más de un año de trabajos decidieron suspender las labores de rescate.
Larrea, que no suele hacer declaraciones públicas, dijo que la empresa colaborará con el Gobierno en el análisis de los estudios técnicos encaminados a un "nuevo esfuerzo" por la recuperación de los cuerpos. (Reporte de Lizbeth Díaz, Editado por Adriana Barrera y Javier López de Lérida)