por Patricia Guerrero Medina
(Amplía con detalles a lo largo de la historia)
Infosel, agosto. 20.- Grupo Posadas, el mayor operador de hoteles en México, contempla la posibilidad de recurrir a la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos para llevar a cabo una reestructura financiera, camino que ya varias compañías mexicanas tomaron para enfrentar los estragos que la pandemia de covid-19 causó en sus negocios.
La propuesta será planteada por el consejo de administración de la compañía a sus accionistas, en la asamblea general ordinaria que está prevista para el próximo 9 de septiembre, de acuerdo con la convocatoria disponible en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
"Presentación, discusión y resolución. . . de los mecanismos de implementación de la reestructura, incluyendo en su caso, la solicitud voluntaria de protección y aprobación de la reestructura prevista en el Capítulo 11 del United States Code de los Estados Unidos de América", indicó la empresa como uno de los cuatro puntos de la orden del día.
La propuesta del órgano de gobierno de Posadas es reflejo del alcance que la emergencia sanitaria por la covid-19 tiene aún en la industria hotelera --pese a las mejoras graduales en afluencia de turistas, sobre todo en destinos de playa-- con una tercera ola de contagios en su momento más álgido; así como a los cambios en la forma de operar de las compañías, que han mermado los viajes de negocios.
"El centro del país, donde se oferta aproximadamente el 40% del inventario continúa con una baja demanda de cuartos como resultado del nuevo esquema de trabajo híbrido, y a que la mayoría de los corporativos siguen operando de manera remota, lo cual tiene una afectación directa en los viajes de negocio", dijo la operadora de hoteles en su reporte del segundo trimestre del año.
Los estragos de la pandemia, además de obligarla a cerrar la mayoría de sus hoteles en los momentos de mayor restricción el año pasado, también obligaron a Posadas a suspender el pago de intereses de un bono para priorizar la liquidez y mantener la operación de su negocio.
El incumplimiento en el pago del bono se extendió por tres trimestres --en los que dejó de pagar 46.5 millones de dólares-- y fue hasta hace unos días que la empresa anunció un acuerdo con los dueños de los bonos para extender el vencimiento de los instrumentos, previsto originalmente en 2022, por cinco años y medio.
De concretarse la posibilidad, Posadas secundaría a otras empresas mexicanas que han recurrido a la protección de la ley estadounidense para hacer frente a la complicada situación en las que cayeron con la pandemia, como Grupo AeroMéxico (MX:AEROMEX), la principal línea aérea del país y que solicitó su entrada al Capítulo 11 en junio de 2020.
Grupo Famsa (MX:GFAMSAA), uno de los principales minoristas del país, también recurrió al Capítulo 11 tras perder la licencia de su brazo financiero y principal fuente de ingresos, Banco Ahorro Famsa; mientras que Interjet, la otrora aerolínea perteneciente a la familia Alemán, también contempló la posibilidad --luego de suspender sus operaciones en diciembre-- aunque aún no es concretada.
Además de la posibilidad de recurrir al Capítulo 11, Posadas planteará a sus dueños la emisión de nuevas notas senior por 392.6 millones de dólares para intercambiarlas por las que están en circulación actualmente; el otorgamiento de garantías sobre algunos bienes inmuebles, así como la aprobación de un acuerdo de apoyo financiero con algunos dueños de bonos.
POSADAS
(Amplía con detalles a lo largo de la historia)
Infosel, agosto. 20.- Grupo Posadas, el mayor operador de hoteles en México, contempla la posibilidad de recurrir a la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos para llevar a cabo una reestructura financiera, camino que ya varias compañías mexicanas tomaron para enfrentar los estragos que la pandemia de covid-19 causó en sus negocios.
La propuesta será planteada por el consejo de administración de la compañía a sus accionistas, en la asamblea general ordinaria que está prevista para el próximo 9 de septiembre, de acuerdo con la convocatoria disponible en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
"Presentación, discusión y resolución. . . de los mecanismos de implementación de la reestructura, incluyendo en su caso, la solicitud voluntaria de protección y aprobación de la reestructura prevista en el Capítulo 11 del United States Code de los Estados Unidos de América", indicó la empresa como uno de los cuatro puntos de la orden del día.
La propuesta del órgano de gobierno de Posadas es reflejo del alcance que la emergencia sanitaria por la covid-19 tiene aún en la industria hotelera --pese a las mejoras graduales en afluencia de turistas, sobre todo en destinos de playa-- con una tercera ola de contagios en su momento más álgido; así como a los cambios en la forma de operar de las compañías, que han mermado los viajes de negocios.
"El centro del país, donde se oferta aproximadamente el 40% del inventario continúa con una baja demanda de cuartos como resultado del nuevo esquema de trabajo híbrido, y a que la mayoría de los corporativos siguen operando de manera remota, lo cual tiene una afectación directa en los viajes de negocio", dijo la operadora de hoteles en su reporte del segundo trimestre del año.
Los estragos de la pandemia, además de obligarla a cerrar la mayoría de sus hoteles en los momentos de mayor restricción el año pasado, también obligaron a Posadas a suspender el pago de intereses de un bono para priorizar la liquidez y mantener la operación de su negocio.
El incumplimiento en el pago del bono se extendió por tres trimestres --en los que dejó de pagar 46.5 millones de dólares-- y fue hasta hace unos días que la empresa anunció un acuerdo con los dueños de los bonos para extender el vencimiento de los instrumentos, previsto originalmente en 2022, por cinco años y medio.
De concretarse la posibilidad, Posadas secundaría a otras empresas mexicanas que han recurrido a la protección de la ley estadounidense para hacer frente a la complicada situación en las que cayeron con la pandemia, como Grupo AeroMéxico (MX:AEROMEX), la principal línea aérea del país y que solicitó su entrada al Capítulo 11 en junio de 2020.
Grupo Famsa (MX:GFAMSAA), uno de los principales minoristas del país, también recurrió al Capítulo 11 tras perder la licencia de su brazo financiero y principal fuente de ingresos, Banco Ahorro Famsa; mientras que Interjet, la otrora aerolínea perteneciente a la familia Alemán, también contempló la posibilidad --luego de suspender sus operaciones en diciembre-- aunque aún no es concretada.
Además de la posibilidad de recurrir al Capítulo 11, Posadas planteará a sus dueños la emisión de nuevas notas senior por 392.6 millones de dólares para intercambiarlas por las que están en circulación actualmente; el otorgamiento de garantías sobre algunos bienes inmuebles, así como la aprobación de un acuerdo de apoyo financiero con algunos dueños de bonos.
POSADAS