Por Lisa Twaronite
TOKIO (Reuters) - Las bolsas japonesas anotaron el lunes su mayor caída diaria desde agosto, y el yen rebotaba desde el mínimo en siete años frente al dólar que tocó después de que unos datos en la sesión revelaran que Japón cayó en la recesión en el tercer trimestre.
El índice compuesto de Shanghái subía un 0,2 por ciento.
El índice Hang Seng de Hong Kong abrió con un alza de un 1 por ciento, pero rápidamente borró las ganancias y bajaba un 0,7 por ciento por una supuesta toma de ganancias de los operadores que se posicionaron para el lanzamiento de un plan de conexión que permitirá a los inversores de Hong Kong y Shanghái comprar y vender acciones en ambas bolsas.
"El mercado ya había respondido a la conexión de las bolsas de valores", dijo Andy Wong, analista senior de inversiones en Harris Fraser (International) en Hong Kong, refiriéndose al mercado de Hong Kong. "Los inversores a corto plazo están recogiendo beneficios en el mercado", dijo.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón cedía un 0,3 por ciento, después de que los datos de crecimiento decepcionantes de Japón hicieron que el índice Nikkei de la bolsa de Tokio cayera un 3 por ciento.
El Producto Interior Bruto (PIB) de Japón se contrajo un 1,6 por ciento anualizado en el trimestre julio-septiembre, en comparación con un aumento del 2,1 por ciento pronosticado por los economistas en un sondeo de Reuters.
Esto se produce tras una contracción revisada de un 7,3 por ciento en el segundo trimestre, que fue la mayor caída desde el terremoto y el tsunami de marzo de 2011.
El informe sorprendentemente pesimista reforzó las expectativas de que el primer ministro japonés, Shinzo Abe, retrasará un aumento del impuesto sobre las ventas fijado para octubre del próximo año, después de que un alza de ese mismo impuesto en abril debilitó al consumo.
El dólar repuntó inicialmente hasta 117.06 yenes, pero renunció a esas ganancias en una jornada extremadamente volátil después de que el Nikkei extendiera sus pérdidas.
Muchos participantes del mercado, en particular los inversores extranjeros, venden el yen para cubrir sus posiciones de renta variable, por lo que la moneda japonesa tiende a ganar cada vez que las acciones caen.
Más tarde el dólar caía un 0,4 por ciento a 115,74 unidades.
La renovada fortaleza del yen ayudaba a que el índice dólar, que sigue la evolución del billete verde frente a seis divisas importantes, cediera un 0,2 por ciento a 87,369.
El euro sumaba un 0,2 por ciento a 1,2542 dólares, cotizando muy por encima de un mínimo en dos años de 1,2358 unidades que tocó el 7 de noviembre.
En los mercados de materias primas, el petróleo estadounidense restaba un 0,8 por ciento, a 75,18 dólares el barril, acercándose a un mínimo en cuatro años de 73,25 dólares que marcó el viernes. El crudo Brent de Londres perdía un 1,1 por ciento a 78,55 dólares el barril.
El oro al contado subía ligeramente en el día a 1.189,08 dólares la onza, después de un repunte de un 2,5 por ciento el viernes por la cobertura de cortos y las compras de fondos.