En la actividad reciente de los mercados, los valores asiáticos subieron en su mayoría, tomando como referencia los sólidos resultados de Wall Street y el creciente optimismo respecto a los beneficios empresariales. El dólar se mantuvo fuerte, cerca de máximos de dos meses, influido por la previsión del mercado de un recorte más moderado de los tipos por parte de la Reserva Federal estadounidense el mes que viene.
El índice Nikkei de Japón experimentó una subida del 1%, alcanzando un máximo de tres semanas tras regresar de vacaciones el lunes. Mientras tanto, el índice MSCI más amplio de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón experimentó un ligero repunte del 0,2%. Esta modesta ganancia se debió a los avances de Taiwán y Australia, que se vieron parcialmente contrarrestados por las pérdidas de los mercados chinos.
Los valores de primer orden de China cayeron un 0,4%, y el índice Hang Seng de Hong Kong descendió un 0,3%. Los inversores esperan con impaciencia planes más detallados sobre las nuevas medidas de estímulo de Pekín, tras los informes de que el gobierno podría emitir 6 billones de yuanes (850.000 millones de dólares) adicionales en bonos del Tesoro en los próximos tres años para apoyar la economía.
Los analistas del BlackRock Investment Institute han expresado una visión cautelosamente optimista sobre las acciones chinas, citando señales de estímulo político y bajas valoraciones. También mantienen una perspectiva favorable sobre las acciones estadounidenses y el tema de la IA en general, reconociendo que la preocupación por las altas valoraciones podría provocar ventas temporales. Los analistas recomiendan considerar la exposición global a mercados con valores infravalorados y potenciales motores de crecimiento.
Los mercados estadounidenses vieron cómo el S&P 500 y el Dow Jones Industrial Average alcanzaban máximos históricos, impulsados por el sector de semiconductores, con Nvidia disfrutando de una subida del 2,4%. El comienzo positivo de la temporada de resultados del tercer trimestre se vio acentuado por los resultados mejores de lo esperado de JP Morgan y Wells Fargo. Se esperan más informes de beneficios de grandes bancos como Citi, Bank of America y Goldman Sachs.
En los mercados de divisas, el dólar retrocedió ligeramente frente al yen, mientras que el euro se estabilizó a la espera de la próxima decisión del Banco Central Europeo sobre los tipos de interés. La opinión predominante es que la Reserva Federal optará por un recorte de tipos menor, de 25 puntos básicos, en lugar de una reducción de 50 puntos básicos, como reflejo de una economía en crecimiento que no corre el riesgo de recalentarse.
Los funcionarios de la Reserva Federal han expresado la necesidad de prudencia en los ajustes de tipos. El gobernador de la Fed, Christopher Waller, abogó por la cautela en los recortes de tipos, y el presidente de la Fed de Minneapolis, Neel Kashkari, anticipa reducciones más modestas. Los operadores del mercado apuestan mayoritariamente por un recorte de 25 puntos básicos por parte de la Fed el mes que viene.
En el mercado de renta fija, los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense experimentaron ligeras subidas en las primeras operaciones asiáticas. El rendimiento del Tesoro a dos años subió hasta el 3,9533%, y el rendimiento a 10 años subió hasta el 4,0885%.
Los precios del petróleo continuaron su tendencia a la baja por tercera sesión consecutiva, y los futuros del Brent cayeron un 2,9%, hasta 75,22 $ el barril. El descenso de los precios del petróleo se atribuye a la menor preocupación por la demanda y al alivio de las tensiones tras los informes de que Israel podría atacar instalaciones militares iraníes, lo que disminuye el riesgo inmediato de interrupciones del suministro.
El oro registró un descenso marginal y cotizó a 2.648,57 dólares la onza.
Reuters colaboró en la elaboración de este artículo.
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