Las bolsas europeas experimentaron hoy un ligero repunte, impulsadas en gran medida por los resultados del sector energético, ya que los precios del crudo subieron debido a la escalada de los conflictos en Oriente Medio. El índice paneuropeo STOXX 600 registró una subida marginal del 0,2%. A pesar de ello, el índice se prepara para su semana más complicada desde el 2 de septiembre, con una caída cercana al 2% a lo largo de la semana, ya que los inversores mantienen la cautela ante la situación en Oriente Medio.
Los valores energéticos han desafiado la tendencia general del mercado, subiendo un 4,5% esta semana, lo que supone el mejor resultado semanal en aproximadamente seis meses. Por el contrario, el sector automovilístico sufrió un notable retroceso, con una caída del 7%. Stellantis (NYSE:STLA), un fabricante de automóviles italoamericano, vio cómo sus acciones se desplomaban casi un 17% tras un aviso de beneficios y la preocupación por la sostenibilidad de su dividendo.
Los estrategas de mercado de SG Kleinwort Hambros señalaron que las tensiones en Oriente Medio están provocando cautela entre los inversores, pero no una aversión total al riesgo. Todavía están evaluando las implicaciones de la situación, lo que resulta especialmente difícil en Europa.
La atención también se centra en los próximos discursos de los responsables del Banco Central Europeo (BCE) Luis de Guindos, Claudia Buch y Frank Elderson a lo largo del día. Además, se seguirá de cerca la reunión del BCE prevista para el 17 de octubre, en la que los operadores esperan un recorte de los tipos. Gehlen anticipa una reducción de 25 puntos básicos y nuevos recortes en los meses siguientes, aunque no prevé un recorte de emergencia.
Los valores inmobiliarios, sensibles a las variaciones de los tipos de interés, también contribuyeron a las ganancias del mercado, con una subida de casi el 1%.
En el frente empresarial, la empresa de transportes danesa DSV (CSE:DSV) vio cómo sus acciones subían un 6,4% tras anunciar una emisión de acciones por valor de 5.500 millones de dólares para ayudar a financiar la adquisición de Schenker.
Por su parte, los valores del sector marítimo se vieron afectados por el acuerdo salarial alcanzado entre los estibadores y los operadores portuarios de la costa este de EE.UU., que puso fin al paro más importante del sector en décadas. Las acciones de A.P. Moller-Maersk y Hapag-Lloyd cayeron un 7,5% y un 12,4%, respectivamente.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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