Por Marc Jones
LONDRES, 7 abr (Reuters) - Cerca de 140 organizaciones sociales y de caridad instaron el martes al FMI y al Banco Mundial, a los Gobiernos del G20 y a los prestamistas privados a ayudar a los países más pobres del mundo a superar la crisis del coronavirus mediante la cancelación de los pagos de la deuda.
El llamamiento, encabezado por la organización británica Jubilee Debt Campaign, se produce un día antes de que se reuniera un grupo de trabajo del Grupo de los 20 encargado de la respuesta al coronavirus para los países en desarrollo. otra parte, el ministro de Finanzas de Ghana, Ken Ofori-Atta, que preside el Comité de Desarrollo que asesora al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional (FMI), señaló a China —el mayor acreedor bilateral de África— a hacer más para aliviar la carga de deuda. campaña pide la cancelación inmediata de los pagos de la deuda de 69 países pobres durante el resto del año, incluso por parte de acreedores privados, estimando que liberaría más de 25.000 millones de dólares para los países, o 50.000 millones de dólares si se extiende hasta 2021.
También pidió que las cancelaciones de la deuda o la financiación adicional estuvieran libres de condiciones de política económica como la austeridad, y que el G-20 respaldara normas de emergencia que impidieran que los países más pobres fueran demandados por acreedores privados.
"Los países en desarrollo se están viendo afectados por un impacto económico sin precedentes y, al mismo tiempo, se enfrentan a una emergencia sanitaria urgente", dijo Sarah-Jayne Clifton, directora de Jubilee Debt Campaign.
Los principales Gobiernos e instituciones ya están presionando para que se adopten algunas de las medidas que piden los grupos.
El FMI está ofreciendo 50.000 millones de dólares de sus servicios de financiación de emergencia y unos 80 países ya han pedido ayuda. El Banco Mundial también ha aprobado un paquete de respuesta de 14.000 millones de dólares para el COVID-19.
Las instituciones también están haciendo presión conjunta para que los acreedores bilaterales oficiales permitan a los países con bajos ingresos suspender sus pagos del servicio de la deuda durante 14 meses a partir de principios de mayo.