Por Michael Elkins
Según un comunicado publicado por los reguladores del mercado chino el viernes, Tesla (NASDAQ:TSLA) ha realizado una llamada a revisión de 80,000 autos fabricados en China e importados producidos desde 2013, por problemas de software y de cinturones de seguridad.
El fabricante de autos eléctricos con sede en Estados Unidos ha retirado 67,698 autos Model S y Model X importados a China entre el 25 de septiembre de 2013 y el 21 de noviembre de 2020, debido a problemas de software que afectan al sistema de gestión de la batería de los vehículos. Tesla también ha retirado 2,736 autos importados del Model 3 fabricados entre enero y noviembre de 2019, y 10,127 del mismo modelo fabricados en China entre el 14 de octubre de 2019 y el 26 de septiembre de 2022, debido a una instalación potencialmente defectuosa de los cinturones de seguridad.
En abril, Tesla retiró un total de 127,785 unidades de autos del Modelo 3 en China, alegando posibles fallos en componentes de semiconductores que podrían provocar colisiones.
"Las retiradas siempre son costosas y a menudo se amplifican de una manera que puede ser perjudicial para la reputación, especialmente cierto ahora que el mercado se ha vuelto hipercompetitivo y la cartera de pedidos de Tesla se ha reducido", dijo Bill Russo, director general de Automobility, con sede en Shanghái, a CNBC.
"Esta llamada a revisión afecta sobre todo a los modelos importados (S y X), por lo que se puede gestionar si se adelantan a ella".
Las acciones de TSLA suben un 2.13% en las operaciones previas a la operación del viernes.