Un equipo de la UNAM, encabezado por Tania J. Porras Gómez, está estudiando la capacidad regenerativa de los órganos reproductivos de estos anfibios para intentar preservarlos. Ciudad de México, 29 de octubre (SinEmbargo).- La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) emitió este martes una alarmante advertencia: los ajolotes, icónicos habitantes de los canales de Xochimilco, podrían desaparecer para 2025.
Un estudio encabezado por la investigadora Tania J. Porras, del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBO) de la UNAM, Gómez y un equipo de especialistas universitarios reveló que la población de estos anfibios disminuyó drásticamente debido a la contaminación del agua, el aumento de su temperatura y la introducción de especies invasoras como la tilapia y la carpa.
En 1998, se contabilizaban hasta seis mil ajolotes en los canales de Xochimilco, pero para 2013 esa cifra había caído a solo 36 individuos. Modelos matemáticos sugieren que para 2025, la especie podría desaparecer por completo en vida silvestre.
En respuesta a esta crisis, los especialistas de la UNAM están estudiando la capacidad de regeneración de los órganos reproductores de los ajolotes, con la esperanza de encontrar métodos para preservar la especie.
Garantizar el acceso a mayor variabilidad genética sería benéfico para su preservación. Foto: UNAM La investigadora Porras Gómez explicó que su equipo está analizando las células germinales de los ajolotes para determinar si estos anfibios pueden regenerar sus órganos reproductivos.
Hasta ahora, se ha encontrado reservorios de células germinales que podrían ser utilizadas para la regeneración de espermatozoides, lo que contribuiría a la variabilidad genética y a la preservación de la especie.
El equipo de la UNAM también está trabajando en la creación de un repositorio de germoplasma, que incluiría muestras genéticas de ajolotes de diferentes centros de investigación en México y el mundo. Este proyecto, liderado por Norma Moreno Mendoza del IIBO, tiene como objetivo compartir y preservar la diversidad genética del ajolote.
Adicionalmente, el equipo del Instituto de Biología, también de la UNAM, encabezado por Luis Zambrano González, colabora con los chinamperos de Xochimilco para reintroducir ajolotes en zonas de los canales que han sido poco perturbadas por la actividad humana. Este esfuerzo busca regresar a los ajolotes de las condiciones de laboratorio a su ambiente natural.
Una ajolote albino habita en una pecera en el Museo del Ajolote “Axolotitlán”. Foto: Cuartoscuro A pesar de estos esfuerzos, la investigadora Porras Gómez señaló que trabajar con ajolotes es complicado por su sensibilidad a cambios en la temperatura y la calidad del agua. Sin embargo, aseguró que el equipo de la UNAM está comprometido en continuar su investigación para salvar a esta emblemática especie.
La base de datos AxoBase, disponible en www.axobase.org, ofrece información gratuita sobre el genoma, transcriptoma y las principales líneas de investigación sobre los ajolotes, y forma una red dedicada al estudio de este anfibio.