Por Anthony Boadle
BRASILIA, 28 oct (Reuters) - La elección en Argentina del peronista Alberto Fernández, a quien el presidente de Brasil Jair Bolsonaro ha catalogado de "bandido de izquierda", prepara el escenario para un choque entre las dos economías más grandes de Sudamérica que podría hacer tambalear el futuro del bloque comercial Mercosur.
Bolsonaro dijo a periodistas en Abu Dabi el lunes que los votantes argentinos habían cometido un error y que no tenía intención de felicitar a Fernández por su victoria del domingo.
La hostilidad ha puesto de manifiesto las profundas diferencias ideológicas en América Latina.
La victoria del centroizquierda Fernández, junto con el triunfo el año pasado del izquierdista Andrés Manuel López Obrador en México, marca el final de las reformas favorables al mercado en ambos países, dejando más aislados a los gobiernos conservadores de Chile, Colombia y Brasil.
Las relaciones entre Brasil y Argentina han sido cordiales y constructivas desde la vuelta de la democracia en ambos países en la década de 1980.
Pese a que compiten en los mercados mundiales de granos y carne vacuna, el Mercosur -que también incluye a Uruguay y Paraguay-, ha fomentado el intercambio de automóviles y otros productos manufacturados, convirtiendo a Brasil en el principal socio comercial de Argentina.
Sin embargo, en momentos de dificultades económicas, a los presidentes les puede resultar tentador apelar a su base de votantes más dura y subrayar las diferencias sobre cuestiones como Cuba y Venezuela.
Antes de su triunfo del domingo, Fernández publicó un mensaje en Twitter pidiendo la liberación del expresidente izquierdista de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, quien fue encarcelado el año pasado en una causa por sobornos, algo que hizo enojar a Bolsonaro.
El ahora presidente electo argentino también trató al mandatario brasileño de "racista, misógino y violento".
Bolsonaro dijo el lunes que su gobierno esperará para ver qué posición toma Fernández una vez que asuma en diciembre.
"Veamos cómo se comporta (...) Espero que Argentina no cambie su curso en lo relativo al comercio".
Los expertos en política exterior y comercio dicen que las dos economías son demasiado interdependientes para quebrar al Mercosur.
La mayor amenaza puede ser un acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea, que ha tomado dos décadas para negociar y enfrenta resistencia en los países europeos.
"La relación entre Argentina y Brasil será, en el mejor de los casos, fría durante los próximos tres años", dijo Welber Barral, ex secretario de comercio de Brasil, quien destacó que espera que los grupos industriales de ambos países traten de "apaciguar" a los gobiernos.
(Editado en español por Javier Leira)