MÉXICO DF, 25 mar (Reuters) - Un 62 por ciento de los maestros de escuelas públicas evaluados en México en el marco de la reforma educativa, uno de los proyectos emblemáticos del presidente Enrique Peña Nieto, resultó reprobado en medio de conflictos sindicales y vacíos respecto a cómo hacer para mejorar su rendimiento.
El secretario de Educación, Emilio Chuayffet, dijo el miércoles que de 183,000 docentes de educación primaria y secundaria que fueron evaluados el año pasado, solamente 70,000 pasaron el examen sin que todavía se haya implementado un plan para elevar su calidad en la mayoría de los casos.
Pese a estos resultados, muchos de estos maestros están dando clases porque la reforma prevé que tienen posibilidad de ser evaluados por segunda y hasta tercera ocasión en el caso de los más antiguos.
"Es una de las áreas donde más atraso tenemos nosotros, la tutoría y el acompañamiento" que está previsto brindar a los maestros que reprueban, dijo el ministro en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros. De los maestros ya evaluados, la mayoría aspira por primera vez a un puesto.
En agosto, cuando comience el año lectivo, la Secretaría tiene previsto evaluar a 600,000 docentes más de un total de 1.5 millones, lo que podría complicar las cosas si no se pone en marcha rápido el sistema de tutoría, añadió.
Para tratar de acelerar este vacío, el Gobierno ha encargado al Instituto Latinoamericano de Comunicación Educativa (ILCE) un programa de tutoría a distancia, señaló.
Chuayffet dijo que el Gobierno federal está dispuesto a aplicar la reforma en la totalidad del territorio y ejercer su autoridad en estados donde un poderoso sector disidente del sindicato ha salido a las calles y provoca a menudo desmanes en protesta contra la reforma y la evaluación de los maestros.
Esto ocurre en los sureños estados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas, los más pobres del país, donde los maestros además quieren impedir las elecciones locales de junio, complicando más las cosas para el presidente Peña quien atraviesa el peor momento de su mandato tras la desaparición de 43 estudiantes en septiembre.
"La reforma educativa tiene que ser una reforma plena en todos los estados, no puede haber excepciones", dijo Chuayffet, aunque aclaró que su implementación total podría ir más allá de la actual administración que termina en 2018.
El secretario dijo que ha propuesto más reformas a la Constitución así como a dos leyes para que el Gobierno federal pueda ejercer su autoridad en los estados que resisten la reforma. Actualmente parte de la implementación está en manos de los gobiernos estatales. (Reporte de Anahí Rama; Editado por Silene Ramírez)