La jornada, tras cuatro semanas de subidas continuas, fue anodina. Lo más notable fue el comportamiento de algunos energéticos. Sí, el petróleo terminó con retrocesos: el barril del WTI se hundió un 2.1% para terminar en 43.68 dólares y el del Brent se deprimió un 1.4% a 47.33 dólares. Pero lo más impresionante fue el derrumbe del Gas natural, que se desplomó un 9.2% para cerrar en un mínimo de 2 años y medio. En este mes, el derrumbe ha sido del 18%.
La razón se llama “El Niño”, el mismo fenómeno que originó al huracán Patricia y que tuvo a México en vilo el fin de semana. “El Niño”, que se teme sea el más iracundo desde 1997, al estar ya las temperaturas del Pacífico ecuatorial en los mismos niveles que aquel año, también está provocando que este 2015 sea el más caluroso de la historia: los primeros nueve meses han marcado las temperaturas más altas desde que se empezó a registrar en 1880, según ha informado el Centro Nacional de Información Medioambiental de Estados Unidos.
“El Niño” no se desvanecerá sino hasta el 2016, y por tanto se teme que el invierno también sea muy templado, lo que significará que se utilicen menos combustibles para calefacción. En consecuencia, el petróleo retrocedió hoy, pero sobre todo lo hizo el gas natural, que es el combustible utilizado para calentar las viviendas y las oficinas.
Pero más allá de lo que sucedió en el mercado de energía, la calma fue el tono general en las bolsas, sobre todo a la espera de lo que diga la Fed el miércoles. La reunión comienza mañana y concluirá el miércoles: allí se seguirá discutiendo si hay espacio para subir tasas en lo que resta de año o si es preferible esperar al año que viene. En esta reunión, se da por hecho que la Fed no moverá las tasas de interés. Y para la reunión de diciembre las probabilidades se han ido disipando y actualmente ya son de apenas un 36%.
Pero además de la Fed, el viernes hay reunión del Banco de Japón. Allí los analistas están muy divididos: en la encuesta de Bloomberg, 16 de 36 analistas esperan que la junta de gobierno se decida por ampliar el programa de compra de activos. Otros banqueros centrales que decidirán sobre los niveles de tasas de interés son los de Suecia y Nueva Zelanda.
Pero como decimos, a la espera de todas esas decisiones, Wall Street se tomó una jornada de pausa, en la que terminaron con cambios marginales y tono mixto. Retrocedieron el Dow Jones y el S&P 500, mientras que el Nasdaq arrancó un par de puntos de ganancias.
Al cierre, el Dow Jones cedía un 0.13% para concluir en los 17,623.05 pts mientras que el S&P’s 500 bajaba un 0.196% y concluía en los 2,071.18 pts. El Nasdaq se apreció un 0.06% para acabar en los 5,034.70 pts.
El peor sector, claro, fue el energético, que se despeñó un 2.5%, seguido del de materiales básicos (-0.8%). Sin embargo, lo contrarrestaron en buena medida el avance de las acciones de consumo de servicios (+0.7%) y las del sector salud, que aumentaron un 0.5%
El único dato del día no fue favorable a una subida de tasas. Las ventas de casas nuevas para septiembre inesperadamente se hundieron a su nivel más bajo desde noviembre del año pasado.