El peso mexicano opera con relativa estabilidad, un poco menos presionado que al inicio de la semana, alrededor de $20.55 spot. La volatilidad se ha adueñado de los mercados financieros y todo puede pasar durante la sesión, mientras los operadores centran su atención en Ucrania, en la Reserva Federal (Fed), que publicará hoy las conclusiones de su cónclave monetario y en los resultados corporativos correspondientes al 4T21. Por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre $20.40 y $20.68 spot (el euro entre $1.125 y $1.132). Consideramos que si la FED logra tranquilizar a los mercado el peso mexicano podría regresar a cotizar en niveles cercanos al $20.40 de la semana.
La cita más importante de la semana llega hoy. A la 1pm, la FED publica su comunicado con los resultados del encuentro de política monetaria, y media hora después su presidente Powell ofrecerá una conferencia de prensa para ahondar en los acuerdos.
Aunque no se espera que la Reserva Federal anuncie ningún cambio inmediato en su decisión de hoy, es probable que los encargados de la política monetaria den señales de un aumento de tasas en marzo, como lo anticipa ya el mercado de futuros. También es posible que se discuta la reducción del balance de activos, que actualmente ronda los 9 billones de dólares. Sobre este punto, Powell probablemente utilizará su conferencia como una oportunidad para proporcionar más orientación, pero no proporcionará detalles sobre el ritmo, el calendario y la composición de la reducción del balance.
En líneas generales, se espera una respuesta más agresiva del banco central estadounidense para contener la inflación, que indique el camino a seguir para el resto del año.
En las últimas reuniones, Powell ha logrado calmar a los mercados financieros y la reacción final de los mercados financieros ha sido positiva a lo comentado por la FED. En este sentido, si el funcionario no se muestra excesivamente preocupado por la inflación y reitera que el banco central estadounidense subirá sus tasas oficiales de forma paulatina a partir de marzo y no incide en la necesidad imperiosa de iniciar el proceso de la reducción del balance de la FED este año, es probable que ello facilite un alivio al castigado mercado bursátil.
Por otro lado, el sentimiento de los inversionistas sigue condicionado por las corrientes cruzadas de los acontecimientos en la frontera entre Ucrania y Rusia. Este miércoles, este sentimiento ha mejorado debido a los esfuerzos de Francia y Alemania para buscar una solución diplomática a través de una reunión con funcionarios de Rusia y Ucrania. Sin embargo, el presidente de EUA, Joe Biden, ha amenazado con sanciones directas a Vladimir Putin si decide lanzar una invasión sobre territorio ucraniano, situación que ha generado fuertes declaraciones del gobierno ruso.
Los mercados también acabarán de digerir los pronósticos del Fondo Monetario Internacional (FMI), que ayer martes recortó su previsión de crecimiento para la economía mundial hasta el 4.4% desde el anterior 4.9%, al mismo tiempo que elevó ligeramente su estimación para 2023 hasta el 3.8% desde el anterior 3.6% anticipado en octubre. En el caso de México, bajó de 4.0% a 2.8% su estimación de variación del PIB este año, mayormente por factores externos como la inflación global, los ciclos de ajustes monetarios e incluso los efectos de la variante ómicron del Covid-19.
El otro factor con incidencia en el ánimo de los operadores, aunque eclipsado por la FED y la geopolítica, son los resultados empresariales. En EUA, ayer se publicaron las cuentas de Microsoft (NASDAQ:MSFT) tras el cierre del mercado estadounidense, que presentó una utilidad superior a la pronosticada.
En México, las ventas al menudeo subieron en noviembre 0.9% mensual y 4.2% anual, con cifras desestacionalizadas. En el acumulado enero-noviembre, la expansión es de 8.2% anual.
Las principales bolsas en el mundo operan con ganancias, con los operadores pendientes de los tres elementos clave que pueden mover los mercados en las próximas sesiones y semanas: el clima bélico que rodea a Ucrania, la reunión de la Reserva Federal sobre política monetaria y los resultados empresariales.