Los problemas político-sociales que han surgido en algunos países de Latinoamérica, como es el caso de Chile, Ecuador y Bolivia, han aumentado la incertidumbre y la volatilidad de los mercados financieros de la región.
En el caso de México, la Bolsa medida por el índice S&P/BMV IPC registró una caída de 1.14%, para ubicarse al cierre en 43,100.77 puntos, perforando dos importantes niveles, que dejan señales técnicas de debilidad, con un primer objetivo en los 43,000 puntos, aunque el soporte más importante está marcado por el promedio móvil de 200 días ubicado alrededor de 42,850 puntos. Sin embargo, nos parece que la caída que tuvo el IPC fue exagerado.
En Estados Unidos, el índice S&P-500 y el Nasdaq cerraron con ganancias de 0.16% y 0.26%, mientras que el DJI-30 quedó sin cambio con respecto a la jornada previa, aunque los cierres de estos índices estuvieron por debajo de los niveles que alcanzaron en las primeras horas de operación.
Consideramos que el desempeño de la Bolsa neoyorquina estuvo determinado en parte por el discurso del presidente Trump ante el Economic Club de N.Y., donde lo más relevante fueron los reproches a la FED por no bajar más las tasas de interés, ya que eso le quita competitividad a Estados Unidos frente a otros países. Con respecto al acuerdo comercial con China, comentó que están cerca de cerrar la “fase 1”, pero reiteró que lo aceptará solo si favorece a su país. Trump también pidió al Congreso de Estados Unidos que se apruebe el acuerdo comercial con México y Canadá (T-MEC).
En el mercado de divisas, el peso mexicano se presionó hasta cerrar en $19.343 representando una pérdida de 1.12% frente al dólar, derivado en parte de la depreciación que mostró el peso chileno. Por otro lado, el dólar registró una ganancia de 0.11%, cerrando el índice DXY en 98.31, y este movimiento también fue parte de la depreciación del peso mexicano.
En el mercado de dinero, los Mbonos registraron con pérdidas, principalmente en los plazos más largos con alza en sus rendimientos de 10 puntos.