La mayoría de los mercados financieros del mundo se vieron afectados este martes ante los decepcionantes datos de inflación que reportaron en Estados Unidos, por arriba de las expectativas del mercado.
La preocupación de los inversionistas no solo está en la probabilidad que no bajen las tasas en marzo, sino hasta la reunión de junio. Sin embargo, contrario al “rebote” que ha tenido la inflación en México, en Estados Unidos bajó en enero a 3.09%, desde 3.35% de diciembre de 2023. El componente subyacente que también estuvo arriba de estimados, con un avance mensual de 0.4% y 3.9% anual, quedó en el mismo nivel que el de diciembre.
Las probabilidades que se mantenga la tasa en 5.50% en marzo subieron este martes a 90.5% desde 84.0% de un día antes, según el CME FedWatch, mientras que para la reunión de mayo subió la probabilidad a 59.5% de que siga la tasa en 5.50, cuando un día antes estaba en 39.3%. Asimismo, el 52.1% estaba a favor de una baja en la tasa a 5.25% en mayo y ahora está en 37.5%.
En nuestro reporte semanal, señalamos que el movimiento de alza del índice S&P 500 (SPX) que alcanzó máximos intradía en 5,048.39, dejaba las primeras señales de agotamiento que sugerían cautela, sobre todo si bajaba de 4,950 donde reactivaría riesgo de caídas adicionales entre 4,890 y 4,770, por lo que es importante que respete estos niveles para evitar ajustes mayores.
Para el índice Nasdaq, un regreso con cierre debajo de 15,735 lo pondría en zona neutral con posibles bajas al promedio de un mes en 15,400, que debía respetar para evitar bajas a 14,700. Con el cierre del S&P-500 en 4,953 y el Nasdaq en 15,656, hay posibilidades que tengan un rebote este miércoles.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años también aceleraron el alza a máximos del año.
En México, la Bolsa se contagió y cayó el índice a 56,907 con pérdida de 0.89%, acumulando una caída de 3.0% respecto a los máximos registrados el miércoles 7 de febrero, quedado el soporte en su promedio móvil de un mes ubicado en 56,528.