Poco ha durado la calma en las bolsas. Cuando las alarmas parecían apagarse, el miedo a una pandemia global del coronavirus ha vuelto a propagarse y esta vez de la mano de Italia.
Tras un fin de semana de malas noticias en el ámbito sanitario -con cinco muertes en el país trasalpino- los mercados de valores empiezan la semana a la baja con el Ibex 35 cayendo más de un 3%, por debajo de los 9.600 puntos y en línea con las plazas de Londres, París y Fráncfort. Descensos más abruptos muestra la bolsa italiana, donde el índice Mib se deja más de un 4%.
Las bolsas europeas están a un paso de borrar -de manera generalizada- sus ganancias anuales en la que está siendo su peor sesión desde junio de 2016, cuando un día antes se produjo la votación del Brexit. La escena no pinta bien. El EuroStoxx se enfrenta a un descenso que podría llevar a la referencia europea a caer a los 3.600-3.625 puntos, lo que representa un retroceso de en torno a un 1,7% desde niveles actuales.
El petroleo cotiza con caídas que se acercan al 3% tanto en el barril de Brent, de referencia en Europa, como en el de West Texas, en EEUU. ¿A dónde van los inversores? Los bonos, el oro -en máximos de siete años- o las divisas como el yen o el franco suizo siguen funcionando como activo refugio.
La jornada en Asia tampoco ha sido tranquila, a excepción de Shanghai, que ha cerrado con un descenso de cerca de 0,3%. En el resto -menos en Japón que ha sido festivo-, el parqué de Corea del Sur -con más de 700 contagiados por coronavirus- se ha desplomado un 3,9%, mientras que Hong Kong y Singapur se han dejado un 1,9% y un 1,2%, respectivamente.