El Dow se va a récords y se aplaca la euforia.¡Cuidado con el mercado de bonos!
Pues sí, llegó Trump y más que doblegar a los mercados, se han lanzado a un rally que los lleva a nuevos récords histórico. El Dow Jones ya lo ha hecho: hoy es el índice que lidera las ganancias. Tras volar ayer un 1.4%, hoy tocó un máximo intradía de 18,769.46 pts. Ahora mismo, el Dow sube un 0.7% a los 18,716 pts, pero el Nasdaq y el S&P’s 500, que llegaron a trepar casi un 1.0%, han moderado las ganancias: el Nasdaq, de hecho, ya cae un 0.5% y el S&P’s 500 apenas avanza un 0.1%.
El mercado sigue apostando que el plan fiscal que trae Trump entre manos, basado en gasto en infraestructura y militar, espoleará a la economía y las ganancias de las empresas. Además, el sector farmacéutico, que Clinton amenazaba con regularlo ante los excesos de precios que cometían algunas empresas, sobre todo de biotecnología, sigue disfrutando de la victoria de Trump. También los bancos, dado que se sospecha que Trump va a relajar la regulación del sistema financiero, ése que luego comete excesos y crisis.
Por tanto, en el Dow Jones vuela JP Morgan (NYSE:JPM) (5.1%), Goldman Sachs (NYSE:GS) (3.0%) y American Express (NYSE:AXP) (2.3%). También el mayor fabricante de maquinaria pesada, Caterpillar (NYSE:CAT) (+2.6%). O las empresas de aviación y aeronáutica, United Technologies (NYSE:UTX) (+1.6%) y Boeing (NYSE:BA) (2.1%). Y por supuesto las dos farmacéuticas del Dow, Pfizer (NYSE:PFE) (+3.0%) y Merck (NYSE:MRK) (+1.3%). Por tanto, los inversionistas siguen comprando, pero empiezan a comprar acciones de riesgo, cíclicas, y en contraste abandonan las defensivas, esas que han subido mucho y empiezan a resultar menos atractivas con el fuerte repunte de la tasa de 10 años. Así, caen las empresas de consumo básico como Procter & Gamble (NYSE:PG) (-3.8%) o Coca-Cola (NYSE:KO) (-2.8%) y también salen de las empresas de telecomunicaciones como Verizon (NYSE:VZ) (-2.7%).
En efecto, la tasa de 10 años sube otros 5 pbs en Estados Unidos para situarse en 2.11%. Y cuidado, eso puede empezar a poner nervioso a los mercados, pues puede castigar el crédito y el consumo, que es el motor de la economía.
Ayer fue día raro: de crash por la noche y euforia por el día. Y hoy empezó de muy buen ánimo. Pero el humor parece haber cambiado, y buena parte de la culpa la puede tener la virulenta subida de la tasa de 10 años de Estados Unidos.