El oro superó el máximo del último año luego de un mes muy turbulento para los mercados financieros. ¿Podrá superar su récord histórico de USD 2075? ¿Qué factores influyen en su precio?
El oro ha tenido un gran mes, con una suba superior al 10%:
¿Cuál fue el motivo? La caída en las tasas de interés generó apetito por el famoso metal. Luego de la crisis bancaria en los EE.UU, el mercado especula con que la Reserva Federal no seguirá subiendo las tasas. Incluso se espera que comiencen las bajas en la segunda mitad del año.
¿Por qué es tan importante esto? Sencillamente porque el oro tiene una relación muy estrecha con la tasa de interés real. Y la tasa cayó fuertemente las últimas semanas, motivando la gran suba del oro:
La tasa de interés real se calcula a partir de la tasa nominal ajustada por la inflación (línea negra en el gráfico). Históricamente, cuando la tasa real sube, el precio del oro tiende a bajar, y viceversa.
La razón detrás de esta relación inversa se debe a los incentivos que tienen los inversores para elegir entre los bonos del tesoro y el oro. Si los bonos del tesoro aumentan su rendimiento, los inversores tendrán mayores motivos para invertir en ellos, en detrimento del oro, que no devenga interés.
Además, la expansión de la hoja de balance de la Reserva Federal fue brutal, desandando más del 60% del ajuste cuantitativo que se inició en los últimos meses:
Esto pondrá presiones alcistas nuevamente en la inflación, por lo que la tasa de interés real tenderá a la baja, convirtiendo al oro en un gran refugio.
¿Podrá superar el máximo histórico?
Recordemos que el oro tocó su máximo histórico en agosto de 2020, cuando cotizó a USD 2075, y volvió a acercarse a esos valores máximos con la invasión rusa a Ucrania en marzo de 2022. Ahora, la reciente crisis bancaria global y la incertidumbre económica y financiera vuelven a impulsar al metal.
Analizando el gráfico del precio del oro, la conclusión es que está en clara tendencia alcista. ¿Hay certeza de que seguirá subiendo? No, pero las probabilidades están a favor.
Otro factor relevante es el accionar de los Bancos Centrales. De hecho, en 2022, compraron oro al ritmo más rápido desde 1967. Si los que manejan el mundo compraron oro sin parar, deben tener sus motivos.
Si le sumamos un contexto global incierto, con una gran crisis financiera, están todos los condimentos dados para que el oro supere su máximo anterior. Está a menos de un 4% de suba. ¿Lo logrará? A estar atentos.