• La variación del PIB en el 1T22 fue de -1.4% trimestral anualizado vs +1.1% esperado.
• El deterioro en la balanza comercial fue clave, las exportaciones cayeron 1.5% t/t.
• Sin embargo, con un avance de 0.7% t/t el consumo privado aceleró su ritmo.
El resultado no modificaría la perspectiva marcadamente hawkish de la Fed
Una de las mayores sorpresas del mes se dio esta mañana con la publicación de las cifras del PIB de Estados Unidos, pues se esperaba un avance de 1.05% trimestral anualizado, pero en su lugar el resultado fue de -1.42%. Sin anualizar, la contracción de la economía fue de 0.36% trimestral (t/t), con lo que se interrumpe una racha de 6 trimestres consecutivos de crecimiento desde el desplome ocasionado por el inicio de la pandemia de Covid-19 en el 2T-20. Asimismo, la variación constituye un cambio mayúsculo respecto a la tendencia que prevalecía, pues el avance del trimestre anterior fue de 1.68% t/t y el promedio de 2021 fue de 1.36%, lo que muestra que la aparición de la variante Ómicron y el inicio de la guerra en Ucrania han impactado negativamente a la coyuntura en el país vecino.
El deterioro en la balanza comercial fue clave, las exportaciones cayeron 1.5% t/t
A partir de los acontecimientos que se dieron en este periodo, es entendible que el mayor daño se haya dado en las estadísticas de comercio, que fue lo que más contribuyó a la caída del PIB. Principalmente, las exportaciones cayeron en 1.51% t/t por las disrupciones que se generaron en las cadenas globales de valor, mientras que las importaciones crecieron en 4.16% por el incremento en costos y los esfuerzos de las empresas para incrementar sus inventarios. En segundo lugar, el gasto del gobierno también fue un factor que jugó en contra del crecimiento, pues se contrajo en 0.69% t/t en relación con el gradual retiro de estímulos.
Sin embargo, con un avance de 0.7% t/t el consumo privado aceleró su desempeño
No obstante, es importante señalar que el consumo personal siguió creciendo (+0.67% t/t) y que lo hizo a una tasa más elevada que la de los 2 trimestres previos. El avance del consumo, que al primer trimestre de 2022 se ubica 5.00% arriba de su máximo precrisis, ha sido relacionado con las presiones que tienen a la inflación en su nivel más elevado en 41 años. El incremento se concentró en los bienes duraderos que subieron a un ritmo de 2.83% t/t, este es uno de los más importantes en la serie histórica y probablemente haya incidido en el reforzamiento de la dinámica inflacionaria, pues bienes como los automóviles han visto sus precios incrementarse en más de 40% anual durante el periodo.
Rumbo Económico
El dato del primer trimestre es inesperado y muestra que los riesgos a los que se enfrenta la economía global se han agravado. No obstante, el estado de la actividad en EUA sigue siendo bastante robusto y sus niveles muy superiores a los prepandemia. Por ello, de momento consideramos que las probabilidades de que se concrete un escenario de recesión técnica en el segundo trimestre son bajas, además de que no pensamos que los resultados modifiquen la visión de la Reserva Federal y probablemente se dé un incremento de 50 puntos base a la tasa de referencia durante la reunión del próximo 4 de mayo.