Esta semana consideramos que el enfoque en el cambiario estará fuertemente centrado en el EUR/USD en el preámbulo de la junta del ECB y el reporte de empleo. En este contexto, existe una elevada expectativa de mayor estímulo, que de acuerdo al consenso podría incluir un recorte de la tasa de depósito de 10-20pb y un incremento de lascompras de 10-20 mil millones de euros al mes.
El estímulo actual y dicha expectativa ha tenido un efecto muy relevante en el desempeño del mercado, como se muestra en la gráfica. En específico, el euro acumula una depreciación de 12.4% frente al dólar este año, con 6.3% de caída hasta la reunión del ECB en octubre, momento en que señalizó fuertemente la posibilidad de mayor estímulo. Desde esa fecha la baja ha sido más fuerte, con una pérdida de 6. 6% a 1.0593 dólares, la más débil entre las principales monedas de EM y DM junto con el CHF, HUF y DKK.
En este contexto, los inversionistas se cuestionan si Mario Draghi logrará sorprender a los mercados, lo que ha hecho en repetidas ocasiones en el pasado. La gráfica también muestra que de manera similar al euro, la expectativa de mayor divergencia monetaria ha llevado a terreno más negativo a las tasas de swaps de corto plazo (2 años) entre Europa y EE.UU., pasando de -69 a -110pb desde la junta de octubre. En nuestra opinión, esta reacción sugiere que los mercados ya descuentan en gran parte una acción significativa del banco central, reduciendo el espacio para una fuerte caída adicional del euro en el corto plazo ante una menor probabilidad de una sorpresa dovish.
Otro riesgo es la posición especulativa en futuros. De acuerdo a los últimos datos del CME, el neto corto ha pasado de 8,873 a 21,840 mdd (38 % del interés abierto) del 20 de octubre al 17 de noviembre, probablemente aumentando los últimos días juzgando por la dinámica del spot, cerca de su mayor nivel del año a finales de marzo tras el inicio de las compras bajo el QE y el mínimo histórico en b33,374mdd en 2012 en medio de la crisis de deuda.
En nuestra opinión esto abre la posibilidad de una cobertura (toma de utilidades) tras la decisión, que podría ser de una magnitud importante sobre todo si Draghi no logra sorprender a los mercados.
A pesar de que este evento pudiera generar una apreciación temporal del euro de materializarse este escenario, vemos nuevos cortos en euros como una en alzas como una oportunidad de mediano plazo muy atractiva. Creemos que el euro pudiera depreciarse no solo por la política del ECB, sino que el inicio de la normalización del Fed probablemente también lo impacte ante mayor divergencia con EE.UU. En este contexto, vemos muy factible que el euro sigua siendo preferida para fondear posiciones en activos de riesgo, aludiendo también a un mayor potencial de apreciación del MXN frente a esta divisa que al USD. En específico, pensamos que el EUR/USD podría finalizar el año en alrededor de 1.04-1.05 con riesgos a la baja, lo que implicaría un cierre entre 17.30-17.47 pesos por euro (actual: 17.60) con base en nuestro estimado de 16.80 para el cierre del peso-dólar.