Las divisas continúan al alza frente al dólar, extendiendo el movimiento que ha sido más claro desde el último reporte de empleo la semana pasada. Las mayores ganancias son del orden de 0.4-0.8% o incluso más en casos como el TRY (+0.9%) y CLP (+1.1%). Entre desarrollados únicamente se observa una pérdida importante en el GBP (-0.5%), mientras que NZD y NOK lideran las ganancias con +0.3%. El EUR/USD sube 0.2% a 1.0736 en un contexto de menor riesgo de crédito tras las noticias sobre Italia que compensa por las expectativas sobre mayor estímulo del ECB, mientras que el JPY cotiza estable en 113.98. El peso mexicano sigue el desempeño de emergentes al apreciarse 0.6% a 20.28 por dólar, su mejor nivel desde mediados de noviembre y en un soporte técnico relevante. No habrá información económica en México y EE.UU. hoy ni intervenciones de miembros del Fed por el periodo de silencio antes de la decisión de la próxima semana.
A pesar de la ganancia del peso en los últimos días mantenemos una postura defensiva, reiterando nuestra preferencia por largos del USD/MXN para la operación intradía y viendo atractivo de reiniciarlas al nivel actual. El tipo de cambio cotiza en una zona de soporte relevante que ubicamos en 20.27-20.30, con el primero correspondiente a una figura de Fibonacci. A pesar del acuerdo de la OPEP y que la reacción del referéndum en Italia ha sido moderada, consideramos que el entorno altamente incierto mantendrá el apetito por activos mexicanos limitado en un entorno de elevada incertidumbre tanto en el frente local como externo, exacerbado por los resultados de la elección en EE.UU.
Sobre el primer factor, creemos que la beta positiva del peso al petróleo será más baja que en el pasado. En nuestra opinión que el enfoque post-electoral en las tasas pudiera reducirla ya que mayores precios de este activo han estado asociados con mayor fuerza a alzas en las expectativas de inflación en ese país. (incluso pudiendo incorporar un ritmo de alzas más agresivo del Fed en 2017).
Como resultado, la correlación negativa del USD y el petróleo ha disminuido. En nuestra opinión, el sentimiento seguirá afectado por la persistente incertidumbre en México sobre potenciales cambios a la relación con EE.UU., con indicaciones tempranas de que ya está teniendo un efecto negativo la semana pasada con los índices IMEF de noviembre. No obstante, reconocemos riesgos a la baja de nuestro pronóstico de cierre de año en 21.50 tras el acuerdo de la OPEP, que podría apoyar el sentimiento hacia EM. Por último, creemos que con el mercado ya descontando una trayectoria agresiva de alzas de Banxico hacia 2017